Hipólito Contreras
La expectativa de crecimiento económico de México para este año, de acuerdo al Fondo Monetario Internacional es de 2.5, lo que superaría el 1.5 por ciento promedio que se tuvo en el anterior sexenio, el sector productivo está optimista, las medidas que ha puesto en marcha el nuevo gobierno son buenas y están generando el interés de empresarios nacionales y extranjeros de invertir más en el país, afirmó el empresario Francisco Lobato Galindo.
Expuso que ante la campaña de terrorismo antes de la elección del año pasado muchas empresas decidieron posponer sus inversiones en México ante la posibilidad de que México viviera un escenario como Venezuela, hoy en el gobierno de López Obrador, esas inversiones están acelerando su entrada a México.
Indicó que otro factor optimista es que ya se liberó el programa de apoyo económico para personas mayores con la entrega de las primeras tarjetas, esas personas tienen mayor poder adquisitivo que se refleja en el consumo interno, se espera que el programa para los jóvenes tenga un efecto similar, todas estas cantidades que el gobierno federal va a dedicar en estos programas sociales y que no van a aterrizar en instituciones sino directamente a los beneficiados, se prevé que tenga un impacto positivo en el crecimiento de la economía interna.
Señaló que el problema principal en el gobierno anterior es que todo se orientó a la economía externa, a los indicadores macroeconómicos sin atender los mercados internos, se descuidó el consumo interno, esperamos que durante este año se dé un importante revés a esta tendencia negativa, y sobre todos los sectores de pequeña y mediana empresa se vean beneficiados.
Comentó que el desmantelamiento de las estructuras de corrupción que se construyeron a través de varios sexenios va a tener un efecto de redistribución de la riqueza, las instituciones en México había andamiajes construidos para propiciar y promover la corrupción, todo el sistema generó estructuras para corromper, era imposible avanzar en proyectos, la corrupción es un problema estructural.
Hoy, dijo, vemos un gobierno federal que tiene el propósito d derribar esos andamiajes de la corrupción estructural, lo que va a tener un efecto en la economía, los recursos que mayormente se desviaban de los programas de gobierno como era SEDESOL, CFE y PEMEX, ahora que se desmantelen esas estructuras de corrupción, ese dinero que se desviaba y se iba a paraísos fiscales, se volverá inyectar en la economía interna, lo que tendrá un efecto inédito en el consumo interno y la inversión.
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