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– A los Pumas de Andrés Lillini les dio tiempo para todo contra el Toluca: de debutar a un juvenil, de fallar al menos cinco oportunidades frente al arco, lanzar chilenas y anotar cinco anotaciones, para golear a los Diablos Rojos, en el estadio Olímpico de C.U.

El futbol es la dinámica de lo impensado y para muestra la alineación de los Pumas, que no contaba con sus pilares, Nico Freire y Juan Dinenno. Era suficiente para desairar a más de un aficionado auriazul, ante un equipo escarlata que se había reforzado en el invierno y presumía a Ignacio Ambriz como su nuevo entrenador.

Pasó lo impensado. Toluca, golpeado por el Covid-19 días antes, sólo miró cómo paseó el balón Pumas, de un lado a otro, para cerrar el primer tiempo con el 1-0 en el marcador y apagar las luces del Olímpico, al final del complemento, con un espectacular 5-0.

Noche mágica en C.U., porque los brasileños, tan criticados por su nulo cartel a su llegada a México, hicieron los primeros goles, hasta con chilena incluida, Rogério anotó dos tantos y uno más de Diogo.

En el complemento, con el partido descorchado y todos los de Pumas llenos de abrazos, Lillini le gritó a Jorge Ruvalcaba, para que se quitara la casaca de suplente y entrara al campo a anotar el 4-0.

El juvenil de 20 años tocó su primer balón en Primera División y con 47 segundos en el campo hizo gol. Ya había pasado de todo, pero falta el quinto tanto, entonces, Meritao apareció para anotar el 5-0, ante el enfado de un Ignacio Ambriz que volvió derrotado de Europa y un Andrés Lillini que sigue haciendo mucho con tan poco que le dan en Pumas.

Los universitarios ilusionan con su debut, en el que anotaron cinco goles, debutaron a un juvenil, sin Dinenno y Freire. Lo impensado.