Hasta 6 meses toma abrir un negocio, afirma el Colegio de Contadores

Hipólito Contreras

Cuando se quiere dar de alta un nuevo negocio se tienen que cumplir varios pasos: se hace una verificación al domicilio, tiene que acudir el representante legal ante las oficinas del SAT, hacen un cuestionamiento, qué tipo de negocio va a poner, una serie de preguntas, se trata de candados, lo que buscan es que haya infraestructura, dimensiones en el domicilio, que tengan trabajadores, esto inhibe las inversiones y que muchos prefieran irse a la informalidad, afirmó Salvador Manuel Méndez, presidente del Colegio de Contadores del Estado de Puebla.

Esto, dijo, limita a la gente que quiere invertir, son tantos los requisitos y que además dependen de un tercero, son reglas fuertes que inhiben las inversiones.

Si la persona es moral, dijo, primero tienen que ir a la Secretaría de Economía para que le autoricen el registro, debe de ir con un notario quien valida que los socios estén dados de alta en el SAT, checan el objeto social, luego tienen que dar de alta a la persona moral, este proceso se lleva como mes y medio, después hay que dar de alta el domicilio fiscal, el verificador es el que aprueba o no si todo está bien respecto al negocio que se va a poner, señaló, para abrir una nueva empresa puede llevar hasta seis meses.

Esto, afirmó, es derivado del abuso de crear empresas sin estructura y hacer operaciones simuladas, por eso el llamado a los contribuyentes y a las personas que aspiran a instalar un negocio que no hagan caso a quienes les dicen que operar simuladamente no es un riesgo, sí hay riesgo y es alto, no es bueno simular operaciones, darle la vuelta al registro de los trabajadores para eludir las contribuciones al IMSS, esto es un riesgo e implica multas y hasta responsabilidad penal.

Por esto, destacó, la gente, dice, si tengo que padecer un calvario para dar de alta una tiendita, si tengo que pasaré por todo esto, prefiero quedarme en la economía informal, éste es uno de los retos en una reforma fiscal para dar facilidades a quienes quieren poner un negocio, flexibilizando candados y con ello evita la informalidad.

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