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Un equipo semiprofesional, Martinica, puso en aprietos a México. El conjunto caribeño sonrojó al ‘Gigante de la Concacaf’ con dos anotaciones, pero acabó perdiendo por 3-2 ante la Selección Mexicana, en el estadio de las Panteras de Carolina del Norte.

Gerarda ‘Tata’ Martino avisó que uno de sus trabajos era hacer que México enfrentará con la misma intensidad a todos los equipos, no importaba el nivel del contrincante. Esa orden tuvo eco en los medios de comunicación, pero no en sus jugadores. México no pudo enseñar la diferencia que hay entre un equipo compuesto por 11 profesionales y otro que en su alineación presentó a seis futbolistas semiprofesionales.

Uriel Antuna, como todo el torneo, hizo su trabajo y al minuto 28 anotó el 1-0 para México. En el complemento, hubo cinco minutos de silencio en el estadio de las Panteras de Carolina. Lo provocó Kevin Parsemain, que pidió cobrar un tiro libre y lo puso en el ángulo de la portería de Jonathan Orozco. El festejo para la selección de Martinica fue un baile sin música, ya que la anotación causó una pausa para el ‘Cielito Lindo’ que se entonaba en las gradas del inmueble.

El canto de los más de 50 mil aficionados que asistieron al encuentro regresó al minuto 60, gracias un gol de Raúl Jiménez a pase de Rodolfo Pizarro. Había más para México, porque Raúl Jiménez filtró con la punta del pie la pelota al área y Fernando Navarro festejó el 3-1.

Tras el tercer gol, el llamado ‘Gigante’ de la zona otra vez se confió. Eso abrió la puerta a que Martinica tuviera otra alegría. Daniel Herelle envió un centro que remató Jordy Delem, el 3-2, que exhibe a México en la Copa Oro.

México clasifica con tres victorias consecutivas, pero fue puesto en aprietos por un equipo que no es reconocido por la FIFA.