Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo cifras del cuarto trimestre de 2018 para Puebla

Rossi A. G. 

El INEGI presenta los resultados trimestrales de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) durante el trimestre octubre-diciembre del año 2018.

• En el trimestre de referencia, la Población Económicamente Activa (PEA) en la entidad se ubicó en casi 2 millones 850 mil personas, que significan 60.6% de la población de 15 años y más.

• En este periodo, 2 millones 778 mil personas se encontraban ocupadas, lo que implicó un decremento de más de 2 mil respecto al cuarto trimestre de 2017.

• La población subocupada llegó a 132 mil personas en el cuarto trimestre de 2018, para alcanzar una tasa de 4.8% frente a la población ocupada, cantidad menor en 0.5 puntos porcentuales a la registrada en el mismo periodo del año anterior.

• Para el trimestre octubre-diciembre del año pasado, la población desocupada se situó en cerca de 72 mil personas y la tasa de desocupación correspondiente fue 2.5% de la PEA, porcentaje igual al reportado en el mismo trimestre de 2017.

• La Población No Económicamente Activa (PNEA) para éste trimestre ascendió a más de 1 millón 849 mil personas, cantidad equivalente a 39.4% de la población de 15 años y más en la entidad.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) da a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), correspondientes al trimestre octubre-diciembre de 2018.

Población económicamente activa

Durante el cuarto trimestre de 2018, la PEA en la entidad se ubicó en casi 2 millones 850 mil personas (60.6% de la población de 15 años y más), cuando un año antes había sido de más de 2 millones 851 mil (61.3%).

Mientras que 79 de cada 100 hombres en estas edades son económicamente activos, en el caso de las mujeres 45 de cada 100 están en esta situación.

Las comparaciones entre el cuarto trimestre de 2017 e igual trimestre de 2018 de la PEA y su división en población ocupada y desocupada se muestran en el siguiente cuadro:

Al interior de la PEA es posible identificar a la población que estuvo participando en la generación de algún bien económico o en la prestación de un servicio (población ocupada), la cual en el trimestre octubre-diciembre de 2018 alcanzó 2 millones 778 mil personas (más de 1 millón 666 mil son hombres y poco más de 1 millón 111 mil son mujeres), cantidad menor en más de 2 mil personas respecto a la del mismo lapso de un año antes.

El considerar a la población ocupada con relación al sector de actividad económica en el que participa, casi 531 mil personas (19.1%) trabajan en el sector primario, 762 mil (27.4%) en el secundario o industrial y cerca de 1 millón 478 mil (53.2%) están en el terciario o de los servicios. El resto 0.3% no especificó su actividad económica. Las cantidades que se presentaron en el periodo octubre-diciembre de 2017 fueron: más de 627 mil (22.6%) en el sector primario, cerca de 769 mil (27.6%) en el secundario, 1 millón 382 mil (49.7%) en el terciario y poco más de 2 mil (0.1%) no especificó su actividad.

Con respecto a la distribución porcentual de la población ocupada por sector de actividad económica y sexo, la situación fue la siguiente: De cada 100 mujeres, 72 laboraron en el sector terciario, 19 en el secundario y 9 en el primario; mientras que, de cada 100 hombres, las proporciones son 41, 33 y 26 respectivamente.

Por posición en la ocupación

Si se observa a la población ocupada en función de la posición que desempeña dentro de su trabajo, se tiene que tres quintas partes del total (60.4%), esto es, más de 1 millón 679 mil son subordinadas y remuneradas; poco más de 688 mil (24.8%) trabajan por su cuenta sin emplear personal pagado; algo más de 277 mil personas (10.0%) no recibe remuneración alguna, y 133 mil (4.8%) son propietarias de los bienes de producción con personal a su cargo.

En este mismo rubro existen importantes diferencias entre hombres y mujeres, así tenemos que, entre el personal subordinado y remunerado, 62.8% son varones y 37.2% son mujeres; por cuenta propia ellos son 58.3% y ellas 41.7%, mientras que en empleadores/as los porcentajes son 84.5 y 15.5 respectivamente. La posición ocupacional donde las mujeres son mayoría es en las actividades no remuneradas, con 64.1% por 35.9% de los hombres.
Por nivel de ingresos

La distribución de la población ocupada de acuerdo con su nivel de ingresos en el cuarto trimestre fue la siguiente: casi 862 mil (31.0%) ganó más de uno y hasta dos salarios mínimos (SM); poco más de 562 mil (20.3%) percibió como máximo un SM; cerca de 406 mil (14.6%) recibió más de dos y hasta tres SM y más de 309 mil (11.1%) no recibe ingresos.

Cabe señalar que, del total de hombres ocupados en la entidad, 48.4% recibe ingresos que no rebasan los dos salarios mínimos, en el caso de las mujeres la cifra es superior, pues se ubica en 55.6 por ciento.

Por duración de la jornada de trabajo

La ENOE también ofrece información sobre el total de horas trabajadas por parte de la población ocupada. Así tenemos que, por un lado, 5.9% de las personas trabajan menos de 15 horas, mientras que en el otro extremo se ubican 30.6% que laboran más de 48 horas semanales. Entre estos dos puntos se encuentra la mayoría, 41.1%, que trabaja de 35 a 48 horas; 20.7% laboró de 15 a 34 horas y los ausentes temporales representan 1.6 por ciento. En promedio, la población ocupada trabajó en el cuarto trimestre de 2018 jornadas de 42.7 horas por semana (46.1 horas los hombres y 37.6 las mujeres).

Algunas otras condiciones de trabajo

La situación que guardan las personas ocupadas en la entidad sobre su acceso o no a los servicios de salud es la siguiente: 576 mil (20.7%) tienen acceso a dichos servicios y 2 millones 196 mil (79.1%) carece de ellos; el resto, casi 6 mil (0.2%) no especificó su situación.

Estos datos mostraron claras diferencias entre hombres y mujeres durante el trimestre que se reporta: 60.7% de quienes tienen acceso a los servicios de salud son hombres y 39.3% son mujeres, mientras que 59.8% de quienes declararon no tener acceso a dichos servicios son hombres y 40.2% son mujeres.

Otro enfoque desde el cual puede caracterizarse a la población ocupada es el que se refiere al tamaño de la unidad económica en la que labora. En función de ello, y tomando en cuenta sólo el ámbito no agropecuario, en el cuarto trimestre del año 2018 sumó 2 millones 229 mil personas (55.0% hombres y 45.0% mujeres), de las cuales algo más de 1 millón 332 mil (59.8%) estaban ocupadas en micronegocios; más de 345 mil (15.5%) lo hacían en pequeños establecimientos; 205 mil (9.2%) en medianos; casi 139 mil (6.2%) en grandes establecimientos, y poco más de 207 mil personas (9.3%) se ocuparon en el gobierno y otro tipo de unidades económicas.

Entre el lapso octubre-diciembre de 2017 y el mismo periodo de 2018 la población ocupada en el ámbito no agropecuario aumentó 4.0%, es decir más de 86 mil personas, siendo en los micronegocios donde se registró el mayor incremento con 8.2%, seguido de los grandes establecimientos con 3.0 por ciento. Sin embargo, en el gobierno hubo un descenso de 5.1 por ciento.

Población subordinada y remunerada

La encuesta permite, además, caracterizar al grupo de personas subordinadas y remuneradas según tipo de remuneración. Así se tiene que 96.6% de ellas son asalariadas y 3.4% obtuvieron percepciones no salariales (comisiones, honorarios, trabajo a destajo, propinas, etcétera).

En el caso de los hombres, 95.8% son asalariados y 4.2% tienen otro tipo de remuneración, y entre las mujeres los respectivos porcentajes son 97.8 y 2.2.

El sector de actividad económica en el que labora predominantemente la población subordinada y remunerada es el terciario. De esta manera, 76.0% de las mujeres en tal condición participó en el comercio y servicios por 42.2% de los hombres; en el sector secundario 18.7% de las mujeres y 41.6% de los hombres; en tanto que 5.0% de las mujeres se ubicó en el sector primario de la economía, por 16.0% de los hombres, quedando sin especificar 0.3% y 0.2%, respectivamente.

El nivel de ingresos y las prestaciones laborales como reparto de utilidades, aguinaldos y vacaciones, así como tener acceso a la atención médica, son aspectos que inciden positivamente en la calidad de vida de la población ocupada. En Puebla, casi 959 mil personas, que representan 57.1% de la población subordinada y remunerada, tienen un nivel de ingreso de hasta dos salarios mínimos.

En cuanto a las prestaciones laborales (sin considerar el acceso a las instituciones de salud), poco más de 696 mil personas (41.4%) recibieron este tipo de prestaciones, algo más de 977 mil (58.2%) no se benefició con ninguna y 0.4% no especificó su situación.
Por otro lado, más de 575 mil personas (34.3%) declararon contar con atención médica gracias a su trabajo, cantidad que supera en poco más de 13 mil personas a la observada en el cuarto trimestre de 2017; así mismo, 1 millón 099 mil (65.4%) no tuvo acceso a dicha prestación y 0.3% no especificó si contaba o no con atención médica.

A su vez, disponen de un contrato escrito cerca de 644 mil personas (38.3%), cifra mayor en más de 28 mil a la del mismo trimestre del año anterior; casi 1 millón 033 mil (61.5%) no tienen contrato y 0.2% no especificó su situación contractual.

Población subocupada

Otra forma de caracterizar a la población ocupada es en función de su condición de subocupación, entendida ésta como la necesidad de trabajar más tiempo, lo que se traduce en la búsqueda de una ocupación complementaria o de un nuevo trabajo con mayor horario. Al respecto, durante el periodo octubre-diciembre del año pasado la población subocupada en Puebla alcanzó poco más de 132 mil personas, que representaron 4.8% del total de la población ocupada en la entidad. De esta población subocupada, 87.6% no buscó trabajo adicional y 12.4% declaró buscar una ocupación complementaria.

La posición que ocupan estas personas en sus centros de trabajo es como sigue: subordinadas y remuneradas 48.9%, por cuenta propia 33.9%, empleadoras 4.2% y personal no remunerado 13.0 por ciento.

El sector de actividad donde se concentra la mayor parte de quienes declaran tener necesidad y disponibilidad para ofertar más horas de trabajo de las que su ocupación actual les permite, es el terciario que concentró más de 59 mil personas (45.2%); le sigue el sector primario con cerca de 40 mil (30.1%), el sector secundario con algo más de 32 mil subocupados/as (24.3%), y 465 personas (0.4%) no declararon suficientemente la actividad en la que laboran.

Informalidad laboral

El empleo informal, o medición ampliada de informalidad, añade a la definición de trabajo informal las siguientes categorías: el trabajo no protegido en la actividad agropecuaria, el servicio doméstico remunerado de los hogares, así como los trabajadores subordinados que, aunque trabajan para unidades económicas formales, lo hacen bajo modalidades en las que se elude el registro ante la seguridad social.

De esta manera, la medición de la ocupación en el sector informal se considera el punto de partida y un componente del cálculo de una medida más amplia: el empleo informal.

Los resultados de la ENOE indican que, en el cuarto trimestre de 2018, todas las modalidades de empleo informal sumaron en el estado de Puebla algo más de 2 millones 039 mil personas, lo que representó una Tasa de Informalidad Laboral  de 73.4% con respecto al total de la población ocupada, porcentaje que es 0.3 puntos porcentuales menor al registrado en el mismo trimestre de 2017.
Por su parte la Tasa de Ocupación en el Sector Informal (TOSI1) fue de 36.1, que equivale a cerca de 1 millón 002 mil personas ocupadas en dicho sector, 3.5 puntos porcentuales más que la obtenida en el mismo trimestre de 2017 que fue de 32.6 por ciento.

Población desocupada

Se define como aquella población de 15 y más años de edad que en la semana de referencia buscó trabajo porque no estaba vinculada a una actividad económica o trabajo. En el cuarto trimestre de 2018 la población desocupada en la entidad se situó en cerca de 72 mil personas y la tasa de desocupación correspondiente (TD) fue de 2.5 con respecto a la PEA, porcentaje igual al registrado en el mismo trimestre

Si se compara la población desocupada por sexo y grupos de edad, se observa que en las mujeres la mayor parte de quienes están desocupadas se concentran en el grupo que va de 15 a 24 años, con 47.3%; en los hombres la desocupación se concentra en el grupo de 25 a 44 años, con 49.1 por ciento.

La encuesta también proporciona información sobre el nivel de instrucción de las personas desocupadas. En la entidad, más de la mitad (55.2%) declararon tener estudios de nivel medio superior y superior, 26.9% dijo contar con secundaria completa y 12.6% tienen primaria completa. Por su parte, quienes no concluyeron la primaria representan 5.3 por ciento.

Población no económicamente activa

La población no económicamente activa (PNEA) agrupa a las personas que no participan en la actividad económica ni como ocupados ni como desocupados. Durante el cuarto trimestre del año recién concluido, poco más de 1 millón 849 mil personas (más de 453 mil hombres y 1 millón 396 mil mujeres), cantidad equivalente a 39.4% del total de la población de 15 años y más, integraban este sector.

Del total de la PNEA, 1 millón 437 mil personas declararon no estar disponibles para trabajar debido a que tenían que atender otras obligaciones, o tenían interés, pero se encontraban en un contexto que les impedía poder hacerlo (tienen impedimentos físicos, obligaciones familiares o están en otras condiciones). Por su parte, poco más de 412 mil declararon estar disponibles para trabajar, pero no llevaron a cabo acciones al respecto, por lo que constituyen el sector que eventualmente puede formar parte del mercado laboral como ocupado o desocupado.

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