María Arévalo
Con trajes coloridos y tradicionales, así como una fiesta se vivió este 5 de mayo en el 160 aniversario de la Batalla 5 de mayo, los ciudadanos disfrutaron después de dos años sin realizarse el tradicional desfile cívico-militar.
Con ovaciones y porras para los contingentes de los centros escolares las familias poblanas sin importar los rayos del sol, revivieron el desfile, aunque por momento se rompió el orden por la lucha de los espacios.
Los carros alegóricos fueron los más ovacionados, realizados por las escuelas, pero los que recibieron más aplausos fueron los presentados por la secretaría de Cultura.