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Serena Williams se fue llorando de Wimbledon el martes después de que una lesión en el tobillo la obligó a retirarse en el partido de primera ronda contra la bielorrusa Aliaksandra Sasnovich, en una jornada en la que sí logró avanzar la máxima cabeza de serie del cuadro femenino, Ash Barty.Reuters) -Serena Williams se fue llorando de Wimbledon el martes después de que una lesión en el tobillo la obligó a retirarse en el partido de primera ronda contra la bielorrusa Aliaksandra Sasnovich, en una jornada en la que sí logró avanzar la máxima cabeza de serie del cuadro femenino, Ash Barty.

La estadounidense Williams, sexta cabeza de serie y siete veces ganadora del torneo, sufrió al comienzo del primer set en una cancha central resbaladiza y recibió tratamiento cuando superaba 3-2 a su rival.

Williams, que busca su 24ª corona de singles en un Grand Slam para igualar un récord, regresó después de un largo receso, pero su angustia era evidente cuando hizo una mueca de dolor y se secó las lágrimas antes de prepararse para servir en el 3-3 después de que Sasnovich nivelara el set.

La tenista de 39 años, que estaba 3-1 arriba antes de la lesión, sollozó en el césped antes de que la ayudaran a retirarse de la cancha.

“Brutal lo de @serenawilliams, pero la cancha central estaba extremadamente resbaladiza. No era fácil moverse”, dijo el británico Andy Murray en Twitter.

Sasnovich, quien practicó servicios mientras Williams estaba recibiendo tratamiento, se compadeció de una oponente que nunca había salido en la primera ronda de Wimbledon en sus 19 visitas anteriores.

“Estoy muy triste por Serena, es una gran campeona”, dijo la número 100 del mundo. “A veces pasa”.

El ocho veces campeón de Wimbledon Roger Federer también expresó su pesar por la salida de Williams y mostró preocupación por la superficie. Su oponente en primera ronda, Adrian Mannarino, se retiró horas antes con una lesión en la rodilla después de un resbalón.

Más temprano, Barty superó un complicado obstáculo inicial al vencer a Carla Suárez Navarro por 6-1, 6-7(1) y 6-1. La australiana, que vistió un atuendo inspirado en la década de 1970 que rindió homenaje a su compatriota Evonne Goolagong quien ganó dos veces Wimbledon hace cerca de 50 años, jugó a un gran nivel en su primer partido en césped en dos años.

Pero la española Suárez Navarro, quien en abril anunció que le habían dado el visto bueno para iniciar la siguiente fase de su tratamiento contra el linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer, jugó también un gran partido bajo el techo corredizo de la cancha central.

Barty mostró toda su variedad de golpes para superar ampliamente a su rival al comienzo y término del partido. Pero Suárez Navarro brindó destellos de su característico revés a una sola mano para llevar a Barty a un set decisivo después de que la australiana vaciló cuando sacaba por el partido estando 5-4.

“Es una luchadora, una gran competidora y la extrañaremos mucho (durante su ausencia del circuito)”, dijo en la cancha Barty, quien no mostró signos de una lesión en la cadera que la obligó a retirarse en el Abierto de Francia.

También ganaron en la jornada la checa Karolina Pliskova, octava preclasificada, que se impuso a la eslovena Tamara Zidansek por 7-5 y 6-4, la argentina Nadia Podoroska, sorpresiva semifinalista en Roland Garros el año pasado, que derrotó a la estadounidense Ann Lin por 6-4 y 7-6 (1), y la estadounidense Venus Williams, que venció en tres sets a la rumana Mihaela Buzarnescu.