Debate
Por Roberto Desachy Severino
Con un Emilio Lozoya protegido en su casita, con el disfrute del dinero mal habido obtenido en el sexenio pasado y mientras Salvador Cienfuegos está a punto de regresar a México, supuestamente para enfrentar una investigación de la Fiscalía General de la República (FGR) por presuntos nexos con el narcotráfico, se incrementa de manera notable la posibilidad de que el presidente Andrés Manuel López Obrador sea tachado como una especie de “libertador de los peñistas”.
Resulta paradójico, contradictorio que quien basa su gestión de gobierno en un supuesto combate a la corrupción se haya lanzado a la tarea de sacar de prisión a dos de los ex funcionarios de Enrique Peña Nieto acusados de delitos graves, como Emilio Lozoya y Salvador Cienfuegos: FGR: Lozoya confesó que Peña Nieto y Videgaray ordenaron recibir 100 millones de pesos de sobornos de Odebrecht para campaña presidencial
Sobre todo porque el presidente Andrés Manuel López Obrador y la 4T parecen apostarle a la corrupción rampante de los gobiernos panistas y priístas como su mejor arma para ganar los comicios concurrentes del 2021. Y el ex director de Pemex, Emilio Lozoya, ha sido especialmente prolífico a la hora de “cantar” las cochinadas del pasado gobierno federal: Lozoya usó aviones de la Fuerza Aérea y maletas deportivas para sacar dinero de Pemex
Con cerca de 100 mil muertos por la crisis sanitaria, el desplome de la economía nacional y la violencia desatada en todo el país, es claro que el gobierno federal no ha logrado mejorar la calidad de vida de la gran mayoría de los mexicanos: Violencia, inseguridad y dominio de los cárteles de delincuencia organizada, uno de los grandes pendientes de AMLO/
EMILIO LOZOYA Y SALVADOR CIENFUEGOS, ¿SALVADOS POR LA 4T?
Aunque López Obrador y su canciller, Marcelo Ebrard, insistan en que la repatriación a México del ex titular de la Sedena, Salvador Cienfuegos, no implica impunidad y/o protección para el ex funcionario de Enrique Peña Nieto, lo cierto es que predomina el temor fundado de que el gobierno federal lo utilice –igual que a Emilio Lozoya- como un arma política electoral en el 2021 y le saque toda la información sobre el ancestral binomio PRIPAN-Narcotráfico.
A cambio de la información y documentos que permitan a Morena y la 4T ganar los comicios concurrentes del 2021, Salvador Cienfuegos se quedaría en su casita, como Emilio Lozoya, sin ser realmente investigados y muchos menos castigados por los delitos cometidos con la investidura de funcionarios públicos.
En el caso del ex secretario de la Sedena, su eventual liberación-exoneración en México podría deberse, también, a presiones de los mandos castrenses a los que el propio AMLO les ha dado una mayor influencia dentro de su gobierno: EU retira cargos contra Cienfuegos para que sea investigado en México.
Con un Emilio Lozoya en su casa, Salvador Cienfuegos que podría seguir el mismo camino y el repudiado ex gobernador peñista de Veracruz, Javier Duarte, cada vez más a gusto y activo en la cárcel luego de recuperar sus bienes en mayo pasado, ya son varios los delincuentes ligados a Peña Nieto beneficiados de una o varias maneras en la actual administración federal.
Con quien parece que no habrá perdón ni olvido es con la ex titular de Sedesol y Sedatu en el cochino gobierno peñista, la ex perredista Rosario Robles Berlanga, quien todo apunta que seguirá en la cárcel y que – por casualidad – es enemiga personal y política de AMLO desde que lo traicionó al armar el complot contra él en complicidad con Carlos Ahumada, Carlos Salinas, Diego Fernández de Cevallos y demás: Giran orden de aprehensión contra Rosario Robles por delincuencia organizada