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En cada una de nuestras decisiones está el proyecto de una patria con democracia y justicia social, afirmó el coordinador de los diputados federales del PRI.
La propuesta es inoportuna, centralista, omisa para eliminar la intromisión del narcotráfico en los procesos electorales y olvida acciones afirmativas, dejando de lado la inclusión, sostuvo el líder congresista.
El voto del Partido Revolucionario Institucional (PRI) es en contra del dictamen que hoy se discute en materia político electoral, con la firme convicción de que en cada una de nuestras decisiones está el proyecto de una patria con democracia y justicia social, afirmó el coordinador parlamentario de esta bancada.
Al posicionar a nombre de los diputados federales del tricolor, el líder congresista aseguró que votarán en contra, seguros de que les asiste la razón, después de analizar, discutir y reflexionar con seriedad los cambios propuestos.
El legislador priista argumentó que esta decisión se sostiene porque no es pertinente, teniendo en cuenta la proximidad de los comicios del 2024; no es prudente lo que propone y es centralista.
Advirtió que, en la propuesta sobre la integración de los órganos electorales, incluidos los tribunales, la mayoría pone a debate la tensión entre república y democracia. Recalcó que no resulta conveniente que la fuente de legitimidad de jueces y árbitros, sea la misma que la de los poderes Legislativo y Ejecutivo.
El exgobernador de Coahuila consideró que dar al juez o árbitro, una hipotética legitimidad producto de una selección directa, paradójicamente los coloca sobre los poderes esencialmente populares y evita su rendición de cuentas.
Evidenció que se quitan recursos presupuestales y facultades a los estados, en materia educativa, de salud o electoral, lo que refleja la falta de aprendizaje de la lección del siglo XIX, cuando el centralismo generó la pérdida del territorio nacional. Como en el pasado, dijo, ahora se prefiere atraer que fortalecer; interferir e intervenir a los estados, que abonar a su bonanza.
Expuso, como otra razón para votar en contra del dictamen, la omisión ante el mayor enemigo de la democracia, el narcotráfico, para luego detallar que en los procesos electorales se asesinan candidatos, hay zonas donde no es posible hacer campaña o, de manera inesperada, contendientes, sobre todo mujeres, se retiran de la competencia.
De no hacer algo muy pronto, recalcó, en unos años viviremos en un narco estado, tras indicar que de 2018 a 2022 se han suscitado, entre homicidios, atentados y amenazas, 717 ataques a candidatos.
A lo anterior, añadió que se requiere que los partidos condenen el narcotráfico y en sus programas de acción se comprometan a luchar contra el crimen, así como estar listos ante la eventualidad de que esta mafia intente construir agrupaciones políticas.
Otra razón para no avalar el dictamen, la relacionó con los derechos humanos y con el anhelo de tener un México unido, con la construcción de poderes públicos donde sea natural y efectiva la igualdad, con acciones afirmativas que tengan un anclaje constitucional.
A los diputados federales del PRI, subrayó Moreira Valdez, nos anima el amor a la patria y nuestro compromiso con la democracia, porque queremos un mejor país.