Staff/Rossi

• Público ovacionó la pelea estelar de Round Zero Fight Night

En una pelea que llevó al éxtasis a los asistentes al gimnasio Mario J. Montemayor de San Nicolás de los Garza, Nuevo León, el boxeador regiomontano, Rashib Martínez, doblegó por decisión unánime al coahuilense Samuel Gutiérrez, en el combate estelar de la velada de Round Zero Fight Night presentada por Atunsito, San Pedro Pacific, Sardimex, Prime Sports Entertainment, M&A.

Los tres jueces vieron ganar por 99-91 al pugilista local, quien sumó así su décima octavo éxito en su carrera profesional, a cambio de sólo dos derrotas.

Antes del inicio de la contienda, pactada a 10 rounds en el peso gallo, se rindió un minuto de silencio a Clemente Martínez, socio de Uppercut Promotions.

Desde el primer asalto, Martínez Valadez, de 24 años, dominó la pelea con combinaciones de volados y jabs, que fueron mermando el físico de Gutiérrez Hernández, quien sufrió su derrota número 36 profesional.

“Panterita” Gutiérrez, de 33 años, respondió al castigo del arranque en los siguientes asaltos, con eficaces rectos que culminaron en el rostro de su rival, ante la atenta mirada de Rogelio Peña, quien fungió como tercero sobre la superficie.

En el séptimo episodio, literalmente la campana salvó de un posible nocaut al saltillense, quien sacó fuerzas y entereza “de quien sabe de dónde” para reponerse y vender cara la derrota.

En el último round, ya con la gente de pie, eufórica por el espectáculo brindado por ambos boxeadores, Gutiérrez buscó acabar el pleito con un sólo golpe, sabedor de que estaba debajo en la puntuación de las tarjetas de los tres jueces.

Al final, ambos peleadores se llevaron la ovación de la noche de parte del público y Rashib regaló un par de guantes y caretas a unos niños, como parte de una promoción de un patrocinador de la velada.

“Fue un poco desesperante, aunque nunca perdimos la calma, mi estrategia siempre es no llevar la cuenta de los rounds, buscábamos el nocaut, pero no se dio”, indicó Martínez al acabar la contienda.

“Siempre fui paciente, fue clave mi preparación que incluyó disciplina, gimnasio, correr y sesiones de boxeo. Este rival fue muy aguerrido y duro”, aceptó el regiomontano, quien dedicó el éxito a su familia, novia y amigos.