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El presidente Jair Bolsonaro dijo el lunes (7) que el gobierno federal brasileño ofrecerá la vacuna contra la COVID-19 a toda la población de forma gratuita y no obligatoria.
“Cuando haya certificación de Anvisa [Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria] (directrices científicas y preceptos legales), el gobierno ofrecerá la vacuna a todos, gratis y no obligatoria”, escribió en su cuenta de Twitter.
Bolsonaro se reunió el mismo día con el ministro de Economía, Paulo Guedes, y también destacó que están garantizados los recursos para la adquisición de las vacunas. “No faltarán recursos para que todos puedan ser atendidos.”
El Ministerio de Salud tiene un convenio para la compra de dosis producidas por la farmacéutica británica AstraZeneca en alianza con la Universidad de Oxford, que incluye un pacto de transferencia de tecnología y producción local de la vacuna por parte de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz).
El gobierno federal también mantiene contacto con otros laboratorios extranjeros que desarrollan inmunizadores y que, de aprobarse, también podrán ser adquiridos para vacunar a la población.
En São Paulo
Un plan regional de vacunación contra la COVID-19 a partir del 25 de enero fue lanzado también el lunes por el gobierno del estado de São Paulo, que priorizará a los ancianos y trabajadores de la Salud.
El gobierno local trabaja con la compra de la vacuna CoronaVac, desarrollada por la farmacéutica china Sinovac en asociación con el Instituto Butantan. El inmunizador aún aguarda el registro definitivo por parte de Anvisa, paso previo necesario para que sea aplicado en la población.
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