René R. Coca

Caza furtiva posible causa del incendio.

Más de 150 personas participaron en logística.

Mazatán, Chis.- Luego de controlado y sofocado el fuego que consumió poco más de 900 hectáreas de la Reserva Ecológica La Encrucijada, autoridades de Protección Civil (PC) informaron que se desconoce la causa del incendio, pero que a decir de algunos pobladores se presume se deba a la caza furtiva que realiza la gente que viola la ley, y que utiliza el fuego para sacar de sus madrigueras a la fauna que es capturada para fines de venta.

Tanto del delegado regional de PC Julio César Cueto Tirado, como los titulares de PC de los municipios afectados coincidieron en que este tipo de incendios daña la flora y la fauna de esta zona rica en manglar, ya que al estar en época de estiaje el fuego se propaga rápidamente, lo que propicia que la gente pierda el control del fuego y huya para evadir responsabilidades una vez que consigue su objetivo.

De acuerdo a la autoridad estatal, para controlar y sofocar el fuego se tuvo una fuerza de tarea de 150 elementos entre la Marina, la Sedena, personal del Ayuntamiento local y PC, por citar algunas corporaciones; sin embargo lo que más les preocupa es que este tipo de incendios son cada vez más recurrentes en esta zona que supuestamente es protegida y que se tiene una Reserva Ecológica de seis mil hectáreas.

Habitantes de Mazatán indicaron que hay comunidades comprometidas con el cuidado de La Encrucijada porque de allí se vive como sector turístico, pero que a ellos también les afecta el fuego; “pero no podemos estar vigilando tanto espacio y es ahí donde los cazadores se aprovechan para quemar y capturar animalitos como tortuga, cocodrilo, armadillo y otras especies” denunció el poblador de la Barra San José, Adrián Victorio Gerardo.

Por otra parte, las autoridades municipales de Mazatán dijeron que han buscado el apoyo de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para tener un mejor control de cuidado al entorno ecológico y de la misma gente, pero que la dependencia federal es casi inexistente y ha hecho caso omiso a las solicitudes por escrito, a pesar de que se trata de un área natural protegida.

Cabe destacar que la Reserva Ecológica La Encrucijada abarca los municipios de Tapachula, Mazatán, Huixtla, Villa Comaltitlán, Acapetahua, Escuintla, Mapastepec y Pijijiapan, donde el depredador más temido es el mismo ser humano que caza especies en peligro de extinción y deforesta las extensiones de manglar, sin que autoridad alguna sancione a las personas que explotan lo que a nivel internacional está estipulado debería ser zona protegida.