Versiones de Judas y los Judas

Autor Bayardo Quinto Núñez

Bitácora de Futuro

Estás dos variantes siempre me han llamado poderosamente la atención, y es la fecha nadie me ha podido dar una certera respuesta, más sin embargo, ahí pernoctan en nuestra Santa Biblia. Es una lógica, que hasta el más ignaro sabe quién será el traidor (es) lo que sucede es, existe la tradición dejar correr el agua fétida, no debería ser así, pero la profecía se está cumpliendo y seguirá en todos los tiempos, que un asociado íntimo será.

Entonces, Judas era un “fiel de Dios y a Jesús”. Cuando existen inclinaciones a situaciones inusuales da inicio la traición, porque se cavila para ello. Ejemplo aplicado a todos los tiempos: “En Betania, en la casa de Simón el leproso, María la hermana de Lázaro, ungió a Jesús con un aceite perfumado valorado en 300 denarios, casi un salario de la época de un año para un trabajador. Judas, protestó con vehemencia, aduciendo que el aceite pudiese haberse vendido y el dinero dado a los pobres, otros apóstoles simplemente asintieron a lo que parecía ser una razón válida”. Está razón, sin razón, era porque Judas era un ladrón y había hecho de sus robos una práctica de la caja que tenía a su cargo.

Por supuesto que “satanás” en ese y otros momentos entró en Judas, cediendo a la voluntad de esa bestia, pero hay que rememorar que nadie actúa solo, siempre hay unos más en compadre hablado, por ello siempre hay que estar presto y comprender que la lealtad debe ser un patrón y acomodarse con lo poco o mucho que se tenga, pues con vestido o sin vestido es mordaz satanás. ¿Pero quien es satanás? Sencillo, nuestra mente es el laboratorio empedernido de eso que llamamos satanás, ahí se maquina todo.

La traición tiene miles de vestido o formas, pero es más perjudicial cuando recae en traidores como Judas que vendió a Jesús en 30 monedas de plata, que en la actualidad oscilan a la cantidad de 66 o 70 dólares norteamericanos. Que bajeza verdad. Pero ni modo. Solo imaginemos que clase de desprecio fijar la muerte en semejante cantidad, pero ni por eso, ni mucho más se debe hacer.

En la última noche, Jesús se reunió con sus apóstoles para celebrar la Pascua y cenando les dijo: lavaré sus pies, pero no todos ustedes están limpios, señalando que uno de los presente lo traicionaría, Judas le preguntó si era él. Jesús le respondió lo que tienes que hacer aslo pronto.

En consecuencia, suele suceder en muchísimas ocasiones en la cotidianidad, que no todo el que te visita o se sienta a comer en tu mesa lleva buenas intenciones, siempre el ser esconde algo por la mala levadura-egoísmo, hipocresía, y etc- que tenemos impregnada en nuestro ser interno en más en algunos y en menos en otros, pero siempre existe, de eso nadie se escapa. De tal suerte, no está fuera de contexto estar como se dice en el argot popular “OJO AL CRISTO”, pues por ahí existen muchos ladrones, y traidores que no actúan solos. La traición actual puede venir acompañada de un abrazo, apretón de mano, los aduladores, una mujer penetrada, y etc…
En fin, Judas se fue y negoció, le entregaron su dinero por la maldad, traicionó a Jesús, y la señal era el beso en la mejía para que los aprehensores pudieran identificarlo. Después Judas se arrepintió, pero ya era muy tarde y, vean lo que pasó con las versiones de la muerte de Judas. 1) En el libro sagrado de Mateo capítulo 27 versículo 3 al 5 dice así: “Entonces Judas, que lo había traicionado, viendo que [Jesús] había sido condenado, sintió remordimiento, y devolvió las treinta piezas de plata a los sacerdotes principales y a los ancianos, diciendo: “pequé cuando traicioné sangre justa”. Ellos dijeron: “¿Qué nos importa? ¡Tú tienes que atender a eso!”. De modo que él tiró las piezas de plata en el templo y se retiró y se fue y se ahorcó. 2) Y en el libro sagrado de Hechos de los apóstoles capítulo 1 versículos 16, 17 y 18 dice: “Varones, hermanos, era necesario que se cumpliera la escritura, que el espíritu santo habló de antemano por boca de David acerca de Judas, que se hizo guía de los que arrestaron a Jesús, porque el había sido contado entre nosotros y obtuvo participación en este misterio. Este mismo hombre, por tanto, compró un campo con el salario de la injusticia y cayendo de cabeza, reventó ruidosamente por enmedio, y todo sus intestinos quedaron derramados.” Este terreno se llama Acéldama, campo de Sangre.

Estás dos versiones de la muerte de Judas, primero se ahorcó y luego se cayó de cabeza, y se le salieron los intestinos, pero antes el propio Judas con el dinero de su maldad compró ese terreno Acéldama, pero aquí viene la gran pregunta, ¿cómo va a comprarlo si el dinero lo dejó tirado en el templo en presencia de los sumos sacerdotes y otros?. Es muy importante estás dos versiones. ¿Cuál será la verdadera muerte de Judas? por supuesto murió, ¿pero cómo? ¡”esa es la incógnita”!

Bayardo Quinto Nuñez. Escritor Nicaragüense.

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