#ANÁLISIS Primer o Tercer Informe de Gobierno del presidente López Obrador

Por: Dra. Ivonne Acuña Murillo

· Académica afirma que mensaje del actual mandatario tiene una connotación política y no tanto administrativa

A nueve meses de iniciado su gobierno, en punto de las 11:00 horas del primero de septiembre, el presidente de la República, Andrés Manual López Obrador (AMLO), sin portar la banda presidencial y con alrededor de 500 invitados en el patio de Palacio Nacional rindió su Tercer Informe de Gobierno, según se leyó a su espalda.

Por supuesto, formalmente hablando, el discurso de este primer domingo de septiembre sería el primero de seis que el presidente López Obrador tiene como obligación de acuerdo con lo marcado por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 69, que a la letra dice: “En la apertura de Sesiones Ordinarias del Primer Periodo de cada año de ejercicio del Congreso, el Presidente de la República presentará un informe por escrito, en el que manifieste el estado general que guarda la administración pública del país (…) Cada una de las Cámaras realizará el análisis del informe y podrá solicitar al Presidente de la República ampliar la información mediante pregunta por escrito y citar a los Secretarios de Estado y a los directores de las entidades paraestatales, quienes comparecerán y rendirán informes bajo protesta de decir verdad. La Ley del Congreso y sus reglamentos regularán el ejercicio de esta facultad”.

Sin embargo, en sentido estricto, el primero de septiembre López Obrador dio su tercer informe de labores al pueblo de México. El primero tuvo lugar a los 100 días de su mandato y el segundo el primero de julio, a un año de su triunfo electoral.

Llamarlo ‘primer’ o ‘tercer’ informe tiene una connotación política que habla de la apuesta por la rendición de cuentas del primer mandatario. De hecho, para algunos habría poco que decir que no se hubiera informado ya durante las conferencias de prensa, dictadas de lunes a viernes.

En este sentido, no es una equivocación ni una casualidad, sino la reiteración de AMLO de su voluntad de informar sobre cada paso que da. Siguiendo esta lógica y asumiendo el hecho de haber informado suficientemente al pueblo de México cada mañana, el presidente se dio el lujo de no entrar en tantos detalles, de no dar tantas cifras en cada uno de los rubros en que su administración ha incidido o dejado de incidir. Por el contrario, se centró en ofrecer un discurso político, más que un informe, a fin de cuentas, su obligación constitucional se remite a la entrega por escrito al Congreso de la Unión de tal informe. Ya harán los legisladores la glosa correspondiente y llamarán a comparecer a las y los diversos secretarios de Estado en relación con su responsabilidad en cada rubro de la administración pública.

De acuerdo con información de El Universal, en una encuesta publicada el 28 de agosto, el presidente López Obrador llegó a este informe de gobierno con una aprobación del 69%; esto es, que 7 de cada 10 ciudadanos está de acuerdo con su gestión. A decir del propio diario, el presidente ha mantenido prácticamente su popularidad, ya que en junio registró una aprobación del 68.7%. Lo anterior supone, que el llamado ‘desgaste’ de gobierno no ha mermado su popularidad.

Algo de historia sobre los informes presidenciales

Hacia el final de la administración del presidente López Obrador, en 2024, la costumbre de rendir un informe del estado que guardan los asuntos de la nación ante el Congreso de la Unión cumplirá 200 años, siendo Guadalupe Victoria el primer presidente en hacerlo. De acuerdo con la Constitución de 1824, el informe se presentaba el 1 de enero. Esto cambió en función de la Constitución de 1857 que ordenaba la presentación de dos informes anuales, el 1 de abril y el 16 de septiembre. Finalmente, en la Constitución de 1917 se estableció que cada 1 de septiembre el presidente debería presentarse a la primera sesión ordinaria del Congreso de la Unión a rendir su informe.

Un hito en esta historia lo marcó un medio de comunicación, la televisión, siendo 1950 el año en que por primera vez casi toda el país tenía la posibilidad de escuchar el informe presidencial. Tocó en aquella ocasión el turno al presidente Miguel Alemán Valdés, de esta manera inició lo que se ha conocido como ‘El día del presidente’.

Con la alternancia en la silla presidencial, este ritual, con autos descapotables, recorridos triunfales, porras, aplausos, confeti y besamanos, se fue modificando en la medida en que el partido gobernante dejó de tener mayoría en el poder legislativo.

El evento con el que finalmente se suspendió la visita del presidente constitucional al Poder Legislativo, ocurrió el 1 de septiembre de 2006 cuando legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) impidieron que el presidente Vicente Fox Quesada, quien afirmó haber ganado dos veces las elecciones presidenciales –una para él y otra para Felipe Calderón Hinojosa-, rindiera su informe en el Congreso de la Unión. Desde entonces, por decisión de Calderón, quien en 2007 todavía acudió a entregar dicho informe y a quien se le negó la tribuna del Congreso, es suficiente que quien encabece la Secretaría de Gobernación entregue por escrito dicho informe, sin la necesidad de acudir al recinto legislativo. Esto quedó así establecido con las modificaciones al artículo 69 Constitucional, de 2008, y con el uso de sedes alternativas como Palacio Nacional, Los Pinos y el Museo de Antropología e Historia.

Una nueva manera de informar

Estos cambios se vieron acompañados de una nueva costumbre, la de los spots previos al informe presidencial. Fox los uso por primera vez luego de que le fue impedido presentar su informe en el Congreso, en 2006.

El actual primer mandatario grabó los propios, haciendo énfasis en el cumplimiento de sus principales promesas de campaña rematando con la leyenda: ‘Primer Informe de Gobierno’, como se verá enseguida.

Spot 1: “No es por presumir, pero soy un hombre de palabra. No han aumentado los impuestos. No ha aumentado el precio de las gasolinas, del diesel, del gas, de la luz. No ha aumentado la deuda pública. Lo que aumentó fue el salario mínimo, 16%. Como no había sucedido en 36 años. También ahora se está entregando más apoyo a la gente humilde, a la gente pobre. Hay bienestar. Los compromisos se cumplen”. El presidente acompaña esta frase, en todos los spots, con el pulgar arriba.

Spot 2: “No es por presumir, pero soy un hombre de palabra. Ya no hay sueldos de 700 mil pesos mensuales, ya no hay pensiones millonarias para los expresidentes. Ya no me cuidan 8 mil elementos del Estado Mayor Presidencial. Ya no hay avión presidencial. Ya no hay atención médica privada para los altos funcionarios públicos que se hacían hasta cirugía plástica, hasta se estiraban (el presidente lleva sus manos a la sien haciendo señal de estiramiento) a costillas del erario. Los compromisos se cumplen”.

Spot 3: “No es por presumir, pero soy un hombre de palabra. Ya ocho millones de adultos mayores del país están recibiendo dos mil quinientos cincuenta pesos bimestrales. Los compromisos se cumplen”.

Spot 4: “No es por presumir, pero soy un hombre de palabra. Ya desapareció el Estado Mayor Presidencial. Los 8 mil elementos que cuidaban al presidente están en la Guardia Nacional, para cuidar al pueblo, al presidente lo cuida la gente. Los compromisos se cumplen”.

Los spots 3 y 4 comienzan con imágenes de los anuncios de la campaña presidencial de 2018, para enfatizar el cumplimiento de las promesas hechas.

Spot 5: Aquí (en la oficina donde se reúne el Gabinete de Seguridad) estamos, como todos los días, de 6 a 7 de la mañana, de lunes a viernes, el Gabinete de Seguridad. El secretario de la Defensa, de Marina, la secretaria de Gobernación, el secretario de Seguridad Pública, el comandante de la Guardia Nacional, para recibir el parte de lo que sucede en todo el país y tomar decisiones para garantizar la paz y la tranquilidad de los mexicanos. Los compromisos se cumplen”.

Spot 6: “Doy gracias al pueblo de México por haber decidido por un cambio verdadero. Pero también por estarme acompañando en la transformación pacífica del país. Que significa separar al poder económico del poder político y que el gobierno represente a todos, atienda a todos, respete a todos y se le de preferencia a la gente humilde. Por el bien de todos primero los pobres. Los compromisos se cumplen”.

Spot 7: “No es por presumir, pero soy un hombre de palabra. En nueve meses de gobierno 930 mil jóvenes están trabajando de aprendices, ganando 3600 pesos mensuales. Nunca más se les va a dar la espalda a los jóvenes. Los compromisos se cumplen”.

Estos spots, mismos que han sido difundidos tanto en los medios tradicionales, como la radio y la televisión, así como en redes sociales, marcan los puntos clave del discurso que el presidente diera en Palacio Nacional, antes de que secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, entregara el informe presidencial en el Congreso de la Unión.

Los anuncios van dirigidos, principalmente, a quien no dedicará tiempo a escuchar el discurso del presidente o para guiar en el desciframiento de lo más importante a quienes sí lo hagan.

Los ejes del Primer o Tercer, como se quiera, Informe de Gobierno fueron:

Separación del poder político del poder económico (spot 6), por lo que a decir del primer mandatario: “El gobierno actual representa a ricos y a pobres, a creyentes y a libres pensadores, así como a todas las mexicanas y mexicanos, al margen de ideologías, orientación sexual, cultura, idioma, lugar de origen, nivel educativo o posición socioeconómica”.

Economía moral y desarrollo económico nacional, en este punto enfatizó que: “Quizá la enseñanza mayor del modelo económico porfirista es que la apuesta por el progreso material sin justicia es políticamente inviable y está condenada al fracaso. Su falla de origen consiste en pasar por alto que la simple acumulación de riqueza, sin procurar su equitativa distribución, produce desigualdad y graves conflictos sociales”.

En otros rubros como el de la democracia participativa, AMLO afirmó: “También estamos transitando hacia una verdadera democracia, se acabará la vergonzosa tradición de fraudes electorales. Las elecciones serán limpias y libres y quien utilice recursos públicos o privados para comprar votos y traficar con la pobreza de la gente o el que destine el presupuesto para favorecer a candidatos o partidos, irá a la cárcel sin derecho a fianza”.

De manera destacada, en el rubro referido a la recuperación de principios y la cooperación para el desarrollo, habló el presidente de política exterior, incluyendo a América Latina y el Caribe y de la relación México-Estados Unidos y al respecto informó: “El Ejecutivo Federal ofrece cooperación, amistad y respeto para todos los países del mundo y, particularmente, para las naciones hermanas de América Latina y el Caribe”. Sobre Estados Unidos, dijo que se hace lo necesario para proteger a los mexicanos que viven y trabajan allá, que se superó la supuesta alza de aranceles con que amenazó el presidente Donald Trump, sobre la construcción de mecanismos de reactivación económica, bienestar y desarrollo, a fin de desactivar el fenómeno migratorio. No perdió la oportunidad de volver a dar el pésame a los deudos del asesinato colectivo en el Paso, Texas.

Como en el spot 2, se refirió al fin de los “lujos, los dispendios y la opulencia que caracterizaban el ejercicio del poder presidencial”.

Mencionó también el triunfo de la estrategia del robo de combustibles; la reducción del costo del gobierno, con la eliminación de los privilegios y prebendas de que disfrutaban los funcionarios de alto nivel, la desaparición de los sueldos de hasta 700 mil pesos mensuales a funcionarios de alto nivel (como en el spot 2).

Como en el spot 4, comentó: “Al presidente de México lo cuidaba un cuerpo de élite llamado Estado Mayor Presidencial, que contaba con ocho mil elementos, los cuales ganaban más que los militares, marinos y policías y tenían mejores prestaciones”. Pero que eso se acabó, pues a él lo cuida la gente y estos militares la pueblo.

El presidente dedicó una parte importante de su discurso a los productores del campo y a las medidas tomadas en su apoyo, como: apoyo económico para la siembra a 1 millón 500 mil ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios; se entregaron 147 mil toneladas de fertilizantes de manera gratuita a 270 mil productores del estado de Guerrero; un aumento de 35% en las percepciones de 2 millones de pequeños y medianos productores, etcétera.

Con respecto a la economía popular, informó que se están entregando 344 mil créditos a la palabra con el programa Tandas para el Bienestar.

Habló también sobre la creación de la empresa “Telecomunicaciones e Internet para Todos”, filial de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para ofrecer servicio de internet sin fines de lucro en todo el país. El mes próximo comenzarán los trabajos para comunicar a 13 mil 500 centros integradores de servicios y a 166 mil pueblos marginados del país.

Habló igualmente de que por primera vez en 14 años se detuvo la caída progresiva en la producción de petróleo, de inversión en infraestructura e inversión privada, de las becas a jóvenes (spot 7), entre otros temas referidos a la construcción de un país con bienestar.

Posicionamiento de los partidos políticos con posterioridad a la entrega del informe de gobierno.

El evento del presidente tuvo lugar por la mañana y por la tarde. A las 17:00 horas, comenzaron los trabajos ordinarios de la LXIV Legislatura. En esta primera sesión se llevó a cabo la recepción del informe de gobierno y el posicionamiento de los diferentes partidos políticos en torno a los primeros nueves meses de gobierno del presidente López Obrador.

Enseguida se hace un breve resumen de tales posicionamiento:

En primer lugar, pidieron la palabra Gerardo Fernández Noroña, diputado del Partido del Trabajo (PT), y el senador independiente Emilio Álvarez Icaza, para reprochar al primer mandatario por no haber acudido al recinto legislativo a presentar su informe.

Por su parte, los oradores de los partidos Verde Ecologista de México (PVEM), del Partido Encuentro Social (PES) y del mismo PT, se decantaron por apoyar al actual presidente. Por ejemplo, Jorge Arturo Argüelles, del PES, pidió a las y los legisladores comportarse como una familia mexicana para hacer acuerdos y dialogar. Se pronunció por apoyar al actual proyecto gubernamental y criticó al PRI y al PAN por no haberse opuesto cuando el país se les estaba yendo de las manos a los presidentes de sus partidos.

Por el PVEM hizo uso de la palabra Marco Antonio Gómez Alcántara, quien dedicó su tiempo a explicar lo que deben hacer los legisladores dada su corresponsabilidad en el gobierno, en función de la conformación de agendas comunes. Hizo una defensa de la Cuarta Transformación (4T).

Reginaldo Sandoval, del PT, destacó el papel histórico de su partido y su respaldo en el proyecto de la 4T para apoyar a los menos favorecidos.

Tonatiuh Bravo, de Movimiento ciudadano (MC), habló de la descomposición que ha afectado a las mujeres y criticó tanto a la sociedad como a los diversos gobiernos que no les han respondido. Sostuvo que MC alza la voz para que se logre un acuerdo nacional para frenar la violencia en contra de las mujeres; que apoya el combate a la corrupción, pero sin la afectación a programas sociales, y la transformación del país sin anclar instituciones ni órganos autónomos. Cuestionó la concentración del poder y la toma de malas decisiones y el año de un presidente con “sus propios datos”.

Por el Partido de la Revolución Democrática habló Verónica Juárez, quien hizo una feroz crítica a la actual administración en rubros como: seguridad, derechos humanos, órganos autónomos, crecimiento y desarrollo económico, programas sociales, creación de empleos, guarderías, abasto de medicamentos, entre otros. Sostuvo que el actual mandatario no se preparó para ser presidente. Lo acusó de soberbio, indolente e ignorante.

Por su parte, Beatriz Paredes Rangel, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en un discurso algo poético y literario preguntó qué hacer con los jóvenes que pululan ante la falta de oportunidades, los pacientes que sufren el desabasto de medicamentos, los millones de mujeres violentadas, la cancelación de obras estratégicas; el crecimiento negativo, la falta de nuevos empleos, el debilitamiento del federalismo, los movilizados del campo, etc. Hizo un llamado a la reflexión y a la escucha serena en torno a las políticas gubernamentales equivocadas, al riesgo de retrocesos irreversibles, por la defensa de las instituciones democráticas y sobre lo que significa el cambio de régimen. Advirtió sobre el peligro de regodearse con el espejismo del presidencialismo. Finalmente, rechazó tajantemente el papel de México como tercer país seguro.

Por el Partido Acción Nacional (PAN) participó Javier Azuara Zúñiga, quien fue rodeado por toda su bancada al momento de tomar la palabra, cuyos integrantes portaban mantas en las que se leía ‘#MorenaNoCumple’, ‘Autoritarismo no, democracia sí’, ‘0 crecimiento económico’, ‘No te enfermes no hay medicinas’, ‘17 500 asesinatos’.

Azuara afirmó que los panistas lamentan que no haya talante democrático respecto de las leyes por parte de Morena y que no respeten los acuerdos parlamentarios, claramente molesto porque su partido no obtuvo la presidencia de la mesa directiva de la Cámara de Diputados. Presentó al PAN como partidario del cambio con rumbo fijo y acuerdos éticos y no por los discursos divisorios ni las improvisaciones. Denunció la falta de seguridad, de medicamentos, la existencia de un gobierno que lapida a todos. Acusó a AMLO de tener un proyecto de país autoritario, clientelar, anacrónico y alejado de la realidad ante una nación que tiene sed de resultados.

Finalmente, Ricardo Monreal, de Morena, después de hablar de las alternancias fallidas, comparó al actual presidente con el caballero de la triste figura, Don Quijote, que heredó un Estado en ruinas, un desastre, un país hecho pedazos, con el tejido social destruido. Fue la herencia maldita que recibió el presidente, sostuvo.

Repitió algunas de las medidas de gobierno tomadas por AMLO como la sanción a los factureros, la separación del poder político del económico, en temas de salud, educación y del campo y el fin del fraude electoral. Hizo énfasis en que decidió improvisar su discurso, pues el escrito no cabía en un momento en que los otros partidos partían del odio y no de la negociación.

Les preguntó a los legisladores de derecha donde quedó el PAN de los 80. Afirmó que es mejor el diálogo que la confrontación y que prefiere la conducción institucional que la ruptura constitucional. Sostuvo que la confrontación es para menores.

Antes de terminar, defendió a Porfirio Muñoz Ledo y recriminó a aquellos que le llamaron espurio, sin considerar que antes de que muchos de ellos nacieran Porfirio ya estaba en la calle luchando por la democracia. Al final, les aseguró a todos los legisladores que “tendrán al mejor presidente de la República de las últimas décadas”. Terminó lanzando vivas a Porfirio Muñoz Ledo, al presidente del país y a México.

Esto fue lo sucedido en torno al Primer o Tercer Informe de Gobierno del presidente López Obrador, de cuyo discurso estuvieron ausentes las mujeres, en particular aquellas que lanzaron un grito desesperado el viernes 16 de agosto, exigiendo se haga realidad el derecho a una vida libre de violencia.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Categorías