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No fue lindo, pero Buffalo toma distancia en el Este de la Americana
EAST RUTHERFORD, N.J. — Durante todo el juego, los Buffalo Bills permitieron grandes jugadas poco habituales contra los New York Jets. Ninguna más notable que permitir que los Jets anotaran con un ‘Ave María’ al final de la primera mitad para llevar el juego a tres puntos de distancia, a pesar de que la ofensiva de los Bills anotó en tres de sus primeras cuatro series.

Pero fue en otro lanzamiento cuando el esquinero Taron Johnson anunció su regreso a la alineación titular de la manera más ruidosa posible, interceptando un pase de Aaron Rodgers con poco menos de dos minutos restantes para preservar la victoria de 23-20.

Johnson, el segundo equipo All-Pro de 2023, estaba jugando en su primer juego desde la Semana 1 cuando sufrió una lesión en el antebrazo.

La defensiva de los Bills permitió ocho jugadas de 20 o más yardas a los Jets. En los primeros tres juegos del año, los Bills permitieron siete de esas jugadas. Ese número ahora es de 15 de las Semanas 4 a 6. Buffalo también permitió que una ofensiva de los Jets que llegó al juego promediando 80.4 yardas terrestres por juego obtuviera 121 yardas terrestres.

La unidad se salvó gracias a dos goles de campo fallados por el pateador de los Jets Greg Zuerlein en la segunda mitad, además de una sólida defensa en la zona roja que permitió a los Jets convertir 1 de 4 viajes a la zona roja.

Si bien los Bills perdieron oportunidades, en particular cuando hubo penalizaciones, forzaron las pérdidas de balón necesarias y no cometieron los errores cruciales lo que resultó en que Buffalo se quedara con la victoria. El mariscal de campo Josh Allen ahora tiene seis juegos consecutivos sin lanzar una intercepción, la racha más larga de su carrera.

El juego en dos palabras: En recuperación. No fue lindo, pero los Bills evitaron la primera racha de tres derrotas del equipo desde 2018 y mantuvieron una ventaja significativa en la AFC Este.

Estadística sorprendente: Josh Allen corría a 16.26 mph cuando soltó el balón en su pase completo de 42 yardas a Ray Davis en el segundo cuarto, la velocidad más rápida de un mariscal de campo en un pase profundo (20+ yardas aéreas) en las últimas dos temporadas (desde la Semana 1, 2022), según Next Gen Stats.

Actuación estelar: RB Ray Davis. Ty Johnson ha sido el segundo corredor del equipo detrás de James Cook en términos de jugadas, y si bien Davis ha mostrado potencial, esta fue una actuación significativa en una noche en la que Cook (dedo del pie) estuvo inactivo.

Las 116 yardas de scrimmage de Davis en la primera mitad fueron la mayor cantidad de un novato de los Bills en cualquier mitad desde 1980. Terminó con 20 acarreos para 97 yardas y tres recepciones para 55 más. Esta ofensiva está en su mejor momento cuando el juego terrestre se pone en marcha, y este tipo de profundidad detrás de Cook es una buena señal.

Tendencia preocupante: Tyler Bass. Los problemas de Bass han sido una preocupación desde el campo de entrenamiento, y el Monday Night Football fue un recordatorio de eso. Si bien fue una noche ventosa (vientos sostenidos de 17 millas por hora y ráfagas en el rango de 30 a 35 MPH), los problemas no son nuevos. Bass probablemente hubiera fallado un punto extra que se fue muy desviado hacia la izquierda, pero también fue bloqueado, además de fallar un gol de campo de 47 yardas. Acertó un gol de campo de 22 yardas en el cuarto episodio, pero ahora tiene marca de 2-5 desde 40 a 49 yardas esta temporada (empatado en el 31.º peor porcentaje desde esa distancia).

Próximo partido: vs. Titans (1 p.m. ET, domingo 20 de octubre)