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Luis Romo anotó el gol que le ha faltado al Cruz Azul en los últimos 23 años, porque a pesar que sólo es el 1-0 de la final de ida del Guard1anes 2021, ese tanto evita que se despierten viejos temores y enseña que La Máquina Celeste, al menos en los primeros noventa minutos, es más equipo que el conjunto de Santos.

Luis Romo, contra Santos, una vez más tiró de Cruz Azul. Cuando el equipo de Guillermo Almada empezaba a arrebatar el balón, el mediocampista apareció con un gol, para aplacar los nervios de los miles de aficionados a La Máquina Celeste y acercar a los cementeros al anhelado título.

Por fin, el campeonato de la Liga MX comienza a dejar de ser una utopía para el Cruz Azul. Están a noventa minutos de evitar que el título que cada torneo parece estar cerca de entrar a las vitrinas de La Noria, se aleje de manera repentina. Así ha pasado los últimos 23 años y Juan Reynoso ha prometido que ya no será así.

Laguneros y celestes no se hicieron daño en la primera parte. Imago6
Reynoso, acostumbrado a exorcizar rachas negativas aplastantes, se confesó desde la jornada tres. Su equipo venció al Pachuca por 1-0 y salió a la conferencia a decir que no era un “vende humo”, que lo necesario era obtener buenos resultados y que no le importaba el cómo. Así, con un futbol sin espectáculo, pero efectivo, está a punto de cumplir la meta.

En el otro bando, estaba Guillermo Almada, un técnico kamikaze, sin miedo al ataque y respaldado por el equipo más joven de la Liga MX. El problema es que esa mocedad no tiene experiencia y se cae con los nervios. Ocurrió. Los de la Comarca comenzaron a bombardear a José de Jesús Corona, pero terminaron rendidos ante la estrategia de los cementeros.

Cruz Azul sale del TSM Corona como el favorito al título, con la ventaja de su lado, con la ilusión de sus aficionados a flor de piel, ante un Santos que sólo tiene una victoria de visitante en todo el torneo, pero no es la primera vez que están ahí, a noventa minutos del campeonato. Por eso Juan Reynoso, en el gol de Luis Romo, le pidió calma a los suyos, porque falta vencer el rival más férreo de La Máquina Celeste en los últimos 23 años, ellos mismos.