Roberto Desachy Severino

En términos electorales, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, puede beneficiarse del conflicto con Irán no si llega a desatarse una verdadera guerra, sino por el hecho de mantener la supremacía norteamericana, alertó Raphael Steger Cataño, Embajador Eminente y decano de la Escuela de Ciencias Sociales de la UDLAP.

Entrevistado, Steger Cataño recordó que a Estados Unidos está muy interesado en la zona del Medio Oriente desde 1953, cuando organizó un golpe de estado para imponer al Sha de Irán, Mohamed Reza Pahlevi, quien sirvió a los intereses americanos hasta los años setenta en que lo derrocó una revolución islámica encabezada por el Ayatolá Jomeini.

Ex embajador de México y diplomático de carrera en varios países, como Arabia Saudita, Inglaterra, Turquía, Australia, URSS (hoy Rusia), recordó que desde Estados Unidos hoy se pretende convertir a Irán en una especie de “eje del mal”, como en su momento lo hizo con Corea del Norte, al que también le acusó de patrocinar el terrorismo.

El error de los norteamericanos es que no entienden la filosofía de los musulmanes, “pretenden imponer viejas políticas a condiciones nuevas”, ya que se quiere democratizar el país a través de una ventanilla: Donald Trump lanza advertencia (otra vez, en farsi) a Irán

IRÁN ES UN PAÍS ORGANIZADO Y CON UNA IMPORTANTE FUERZA MILITAR

En entrevista con Desde Puebla, Steger Cataño –a quien le correspondió cerrar la embajada de México en Irán en la década de los 70s por órdenes de la SRE-negó que en este momento haya una guerra o conflicto bélico directo, como el que se dio entre el mismo Irán VS Irak.

Lo que sucede en este momento es algo similar a la guerra fría entre Estados Unidos y la URSS o la llamada “crisis de los misiles” con los mismos americanos y Cuba, cuando el mundo sí estuvo cerca de padecer una conflagración nuclear.

En ese sentido, el Embajador Eminente y académico de la UDLAP subrayó que –aunque el poder militar norteamericano no se puede comparar con el de ese país del golfo pérsico- Irán está organizado, cohesionado y cuenta con una importante fuera bélica, además de que su ubicación geográfica es estratégica por el Estrecho de Ormuz: Crisis EU-Irán, momento oportuno para repensar poderes de guerra de Trump: experto

De alguna forma, estos factores podrían inhibir el que se desate una guerra tal cual, aunque tampoco puede descartarse que Estados Unidos recurra a una confrontación bélica “como demostración de poder”, advirtió Steger Cataño.

TRUMP NO OBLIGARÍA A MÉXICO A APOYAR EN UNA GUERRA CONTRA IRÁN

El diplomático, quien durante la llamada “guerra del golfo” se desempeñará como el embajador mexicano en Arabia Saudita, subrayó que nuestro país es uno de los principales socios comerciales de Estados Unidos, además de que también tiene tratos de negocios con los iraníes, aunque “los materiales que se le compran a ese país se pueden adquirir en EUA”.

Recordó que cuando la revolución islámica destronó al Sha de Irán y México le dio asilo político en Acapulco y Cuernavaca, antes de que Mohamed Reza se fuera a tierras norteamericanas, se generó una crisis internacional en la que varios países, como Estados Unidos, Alemania, Canadá y nuestra nación debieron cerrar sus embajadas en ese país.

Steger Cataño recordó que le correspondió a él cerrar la embajada mexicana en Irán, una medida difícil, debido a que “ese tipo de hechos siempre dejan heridas políticas”. Cuestionado acerca de si Donald Trump podría tratar de obligar a México a apoyar militarmente en una eventual guerra con los iraníes, descartó esa posibilidad.

Nuestra nación condena al terrorismo, pero no a los países del Medio Oriente, además. México entrará al Consejo de Seguridad de la ONU en septiembre próximo y siempre ha optado por privilegiar el diálogo como mecanismo de solución de conflictos: Trump amenaza a Irán con atacar sus tesoros culturales

Finalmente, el académico de la UDLAP aseveró “no creo que haya una confrontación militar, a Donald Trump no le conviene incendiar más el Medio Oriente y, por el contrario, pienso que hay espacio para la negociación diplomática”.