Roberto Desachy Severino
La fiscalización de los recursos públicos es un arma política, una moneda de cambio con la que el gobernador en turno castiga a los detractores, premia a sus incondicionales y negocia con los alcaldes que, quizás, no pertenecen a su establo, pero tampoco le son adversos.
Como sus antecesores del PRI, el ex mandatario Rafael Moreno Valle (q.e.p.d) utilizó a la Auditoría Superior del Estado del Congreso como una macana para amedrentar a presidentes municipales incómodos, como Eduardo Rivera Pérez, al que incluso inhabilitó y luego habilitó con la mano en la cintura, cuando quiso que su mujer Martha Erika Alonso (q.e.p.d) lo tuviera como candidato a la alcaldía de Puebla al creerse el cuento de que Lalito podía volver a ganar.
En este contexto, Moreno Valle le pagó al ex edil de Puebla, Luis Banck Serrato, el “favor” político de no disputarle a Martha Erika Alonso la candidatura del PAN al gobierno de Puebla n el 2018 convirtiéndolo –a través de Jorge Aguilar Chedraui y demás ex diputados morenovallistas- en el ÚNICO ex alcalde de la gestión 2014-2018 al que le fue aprobada su cuenta pública del 2017: Nota en Vídeo: Regidor Eduardo Covián acusó de omisión al ex alcalde Luis Banck
Banck Serrato es el ÚNICO de los 217 ex presidentes municipales del período 2014-2018 que tiene el privilegio de que le haya sido aprobada por el Congreso morenovallista su cuenta pública del 2017, a pesar de que dio 84 basificaciones al final de su gestión y de diversas anomalías en el contrato con Citelum y otras detectadas en el proceso de Entrega-Recepción: Comisión Transitoria podría llamar a comparecer a Luis Banck por irregularidades en el contrato de Citelum
Luis Banck fue el consentido” de “Dios” hasta en los últimos días del morenovallismo.
ROGELIO MANUEL MARQUINA SÁINZ, ¿EL CABALLO NEGRO PARA LA ASE?
Durante décadas, el hoy llamado Auditor Superior del estado (antes conocido como el Órgano de Fiscalización Superior) ha sido un garrote político, con el que los gobernadores y el Congreso local en turno castigan o premian a los presidentes municipales, ya que es la instancia supuestamente encargada de fiscalizar sus cuentas públicas y de iniciarles procesos administrativos, de los que deriva una posible inhabilitación.
Hoy, la mayoría de diputados de Morena en el poder Legislativo local tiene la oportunidad histórica de quitarle el sesgo partidista a la ASE y designar como su titular a alguien con un perfil técnico, para que investigue, fiscalice, analice y dictamine las cuentas públicas sin intereses políticos: CCPEP fija postura sobre la designación del Auditor Superior del Estado de Puebla
Son varios aspirantes a ocupar dicho cargo y relevar a David Villanueva Lomelí , el yerno del ex gobernador Melquiades Morales Flores y quien se encargó –entre otras cosas- de aprobar las cuentas públicas del morenovallismo y de armar los pliegos de observaciones y luego de cargos al ex alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez: La ASE fue omisa en obras emblemáticas del morenovallismo
Hoy, Villanueva Lomelí ya tiene otro cargo y el tiempo demostró que los números de Rafael Moreno Valle y sus obras no debieron ser aprobadas al vapor y que fueron intereses político-partidistas lo que hizo que la ASE los avalara. Por lo mismo, la designación del próximo auditor superior es de gran trascendencia y así deberían asumirlo todas las fracciones parlamentarias: De acuerdo a la ley se elegirá al fiscal general del estado, afirmó el diputado Gabriel Biestro
EL ABOGADO QUE TUMBÓ LA PRIVATIZACIÓN DEL SERVICIO DE LIMPIA EN SAN ANDRÉS CHOLULA
En este contexto, uno de los precandidatos al cargo es Rogelio Manuel Marquina Sáinz, egresado de la UDLA y con maestría en Derecho Empresarial y Fiscal. Además, es uno de los abogados que tumbó la privatización del servicio de limpia en San Andrés Cholula y, con ello, ayudó a que dicho ayuntamiento se ahorrará muchos millones de pesos: Buscan que Pro-Faj regrese 75 mdp por la manera ilegal en que obtuvo la concesión de limpia en San Andrés Cholula, alerta Mirón Terrón
Marquina Sainz NO es el candidato de Morena, PRI, PAN ni de ningún partido para encabezar la Auditoría Superior del Estado, pero sí tiene un proyecto de trabajo, que consiste en “evaluar la actuación Institucional con base en la eficaz y transparente rendición de cuentas, uso de tecnologías de la información, coordinación y colaboración con otras instancias gubernamentales en el marco de funciones de la dependencia.
“Con la finalidad de erradicar la corrupción y robustecer no únicamente las recomendaciones que se deriven de las revisiones, sino las estrategias y acciones que contribuyan a mejorar el marco legal”, además, propone “reforzar la confianza ciudadana mediante la culminación de sanciones efectivas por el cumplimiento de irregularidades y el resarcimiento justo de los daños causados a la hacienda pública”.
Insisto: Marquina Sainz no es político ni está apadrinado por algún personaje de Morena, PAN, PRI, etc. Pero si el presidente del Congreso local, Gabriel Biestro, cumple lo que dijo apenas en julio pasado, en el sentido de que el próximo titular de la ASE debe ser alguien que cumpla los requisitos de ley para que el organismo deje de usarse como arma electorera, entonces este personaje puede ser el “caballo para acceder al cargo: De acuerdo a la ley se elegirá al fiscal general del estado, afirmó el diputado Gabriel Biestro