Roberto Desachy Severino
Y para coraje, envidia, frustración y rabia de la presidenta municipal actual de Cuautlancingo, la ex panista y neo morenista Guadalupe Daniel Hernández, la verdadera “Reina” de la región no es ella, sino María Victoria Pérez Rosete, mejor conocida como “doña Vicky”, a quien vecinos de la unidad habitacional Vivah 1 –en la reserva territorial Quetzalcoatl- llevan años acusando de realizar desalojos ilegales, apropiarse de viviendas y amenazarlos sin que –misteriosamente- proceda ninguna de las denuncias en su contra.
La historia no tiene pierde: cuando Melquiades Morales Flores era gobernador de Puebla puso al frente del ya desaparecido Instituto Poblano de la Vivienda (IPV) a otro priísta, Oscar Aguilar González. En ese tiempo, el constructor José Luis Ramírez Mantilla –pariente político de Melquiades Morales Flores- y la hipotecaria Su Casita obtuvieron el contrato para levantar 570 casas en la reserva territorial Quetzalcoatl.
Los colonos de dicha zona –Maya sur y norte –deben padecer incontables anomalías: sigue sin ser municipalizada a Cuautlancingo y, con ese pretexto, los alcaldes y funcionarios no dan servicios o lo hacen cuando quieren. De ahí surgió la “Reina” de la reserva territorial, quien desde hace 20 años se presentó como la voz de dichos vecinos ante los subsecuentes gobiernos.
No solo eso, también se encargó de armar toda una campaña de desprestigio contra el IPV y su ex titular, Oscar Aguilar González, hasta que logró quedarse con el “pastel”, es decir, que desapareciera esa dependencia para que María Victoria Pérez Rosete repartiera las casas vacías a cambio –dicen los vecinos – de 50 mil pesos, como lo ratifica esta publicación del 2006 de la revista Proceso, que le da trato de “presidenta” de la colonia: Puebla: Turbios negocios de candidato del PRI al Senado
LA ELBA ESTHER GORDILLO DE CUAUTLANCINGO
Después de más de 12 años de ser “representados” por doña Vicky, los vecinos de Vivah 1 siguen sin ver los “beneficios”, porque los servicios son malos y esporádicos. Casi nunca sirve el alumbrado y es frecuente que la “Reina” les pida cooperación para ponerlo a funcionar, lo que les ha llevado a sospechar que podrían ser los mismos cómplices de María Victoria quienes se roban el cable.
También la acusan de haber “corrido” de las viviendas a gente que las necesitaba, pero que no se pusieron la del “Puebla”. El IPV asignaba las casas y los ciudadanos las habitaban, se presentaban ella y sus allegados para pedir coperacha con tal o cual pretexto y, si se las negaban, al poco tiempo eran amedrentados hasta por policías municipales para que se fueran.
Otro hecho que llama la atención de los quejosos es que María Victoria Pérez es demasiado poderosa o invisible para Fiscalía de Puebla antes PGJ, porque pesan sobre ella y su gente muchas denuncias, incontables, sin que durante los gobiernos de Rafael Moreno Valle y Mario Marín Torres se hubiera procedido.
En sus más de 12 años en el poder al frente de la reserva territorial, la “Reina” de Cuautlancingo bloquea o permite construcciones, como la de Bodeguita Exprés y hasta acabó con áreas verdes, al ponerles encima banquitas y mesas de cemento…compradas con dinero de los vecinos. La acusan de “ganarse” a la gente prometiendoles escrituras a bajo costo.
DE LA INSEGURIDAD COMO UN GRAN NEGOCIO
Desde luego que nadie de los que viven en Vivah 1 se acuerda de haber votado NUNCA o firmado NADA para que la “Reina” de Cuautlancingo los representara, pero entre ella y el anterior ayuntamiento, de extracción panista y en el que la actual presidenta, Guadalupe Daniel Hernández, formó parte, encontraron la manera de hacer un jugoso negocio con la inseguridad.
La falta de vigilancia policía y la incompetencia del ex edil, Félix Casiano, y de la edilesa vigente han permitido la proliferación de asaltos. Para aprovecharlos, el síndico municipal anterior, Víctor Xicoténcatl, que por cierto hoy cobra como director de Gobernación, se puso de acuerdo con la “Reina” para que cerrara algunas calles con rejas y les vendieran a los vecinos 700 por cada llave para poder entrar ¡a su propia colonia!.
Además, María Victoria y su cómplice, Víctor Xicoténcatl, quieren que las 570 familias que viven en la reserva territorial paguen mensualmente 500 pesos (cada una) por “vigilancia”. Si se sacan cuentas, se llegará a la conclusión de que la “seguridad” que se les pretende vender a los vecinos sería la más cara de la historia.
Ésta es, apenas, una parte de la historia documentada de la “Reina” de Cuautlancingo. ¿La conocerá Guadalupe Daniel Hernández y, si es así, por qué ella y su gobierno permiten tan bestial corrupción?.