Hipólito Contreras

Por primera vez en Puebla es aplicada una política de transformación del campo gracias a la entrega directa de apoyos a los productores con el objetivo de que mejoren su calidad de vida, además de fomentar la producción agropecuaria, afirmó Ana Laura Altamirano Pérez, titular de la Secretaría de Desarrollo Rural.

Destacó que 2020 fue el primer año en que se entregaron incentivos subsidiados al 100 por ciento para todas las cadenas productivas en beneficio de más de 170 mil familias del campo en 373 mil 951 hectáreas.

Señaló que al ser el sector agropecuario una actividad esencial por la generación de alimentos, durante la contingencia sanitaria la Secretaría mantuvo la entrega de los apoyos contenidos en los programas a su cargo, cumpliendo así con las metas establecidas en el Plan Estatal de Desarrollo para la Recuperación del Campo Poblano.

La funcionaria destacó la política de café, única a nivel nacional, en la que se aplica un presupuesto de 200 millones de pesos, ha apoyado a 13 mil 815 cafeticultores, dando como resultado la producción de granos, al nivel de los mejores del país, para que Puebla sea el principal generador de cafés de especialidad.

Para ello, destacó, la Secretaría impulsó programas de acompañamiento técnico con especialistas, cursos y talleres, que se traducen en mejor calidad de la bebida, precios e ingresos; además de estrategias comerciales que han llevado el café poblano a mercados internacionales especializados.

La titular de SDR informó que, a través del programa de Fortalecimiento e Impulso al Campo Poblano, fueron invertidos 217 millones de pesos para 33 mil 878 paquetes tecnológicos de media tonelada cada uno, diseñados para cada cultivo y región, mismos que lograron incrementos en la producción desde un 15 hasta un 70 por ciento.

Dando cumplimiento al mandato del gobernador Miguel Barbosa Huerta, en sintonía con lo dispuesto por el Gobierno Federal, afirmó que todos los apoyos entregados por la Secretaría fueron de manera directa y sin intermediarios, evitando así prácticas del pasado que hacían cobros a las personas beneficiarias o bien, respondían a intereses políticos a través de organizaciones.

Destacó la vinculación comercial generada por la SDR que derivó en la exportación de 529 toneladas de hortalizas y tomate, entre otros, de las regiones de Chignahuapan, Ciudad Serdán y Acatzingo.

Indicó que los productores que exportan sus productos tras cumplir con todas las normas de inocuidad y calidad, tienen ganancias de hasta un 400 por ciento mayor que si vendieran sus cosechas en mercados de abasto o tiendas de autoservicio en México.