Roberto Desachy Severino

Como sus antecesores en el cargo, el nuevo titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE) del Congreso local, Francisco Romero Serrano, fue elegido por factores de poder, que –empero- siempre han intervenido a la hora de definir puestos públicos y políticos de importancia.

Pero ahora corresponderá a Romero Serrano ejercer la titularidad de la ASE con dignidad, apegado a derecho y no como chivo en cristalería lanzando cruzadas contra quienes él ve como adversarios políticos o enemigos del gobernador Miguel Barbosa, Gabriel Biestro, etc: Desde el Vídeo: Francisco Romero Serrano descarta sesgo partidista como Auditor Superior del Congreso local

Porque el gobernador Miguel Barbosa Huerta no ha ordenado persecución ni campaña alguna contra el rector de la BUAP ni la presidenta municipal de Puebla capital, Alfonso Esparza Ortiz y/o Claudia Rivera Vivanco. Así que si Romero Serrano cree que cumple con su deber al ordenar auditorías sorpresa y demás maniobras contra ellos, alguien tendrá que decirle que se equivoca.

Fuentes informativas con absoluta confiabilidad precisaron a Desde Puebla que el mandatario estatal no ordenó nada contra Claudia Rivera o Alfonso Esparza y que las respectivas auditorías deberán llevarse a elementos técnicos, no políticos. Si en la fiscalización se encuentran anomalías, entonces deberá llevarse a cabo el proceso legal y comprobatorio de rigor, pero sin línea.

Así que, si usted se encuentra con Romero Serrano, díganle que – en lugar de perseguir molinos de viento o fantasmas- trate de cumplir bien con su obligación de vigilar el buen uso de los recursos públicos: Francisco Romero Serrano aspira a presidir la Auditoría Superior del Estado

DESLEALTAD, LO QUE CAUSÓ EL CESE DE EDURNE OCHOA

La secretaria de Igualdad Sustantiva del gobierno estatal, Mónica Díaz de Rivera, quiso nombrar a Edurne Ochoa como su colaboradora y defendió su nombramiento a cualquier costo, incluso cuando discretamente le hicieron ver que la titular del concepto El Cuerpo No Miente (ECNM) había respaldado la campaña de Martha Erika Alonso en el 2018: En la Escala de Afectividad, Martha Erika Alonso es la mejor posicionada al gobierno de Puebla

El gobernador Miguel Barbosa Huerta le dio a su secretaria de Igualdad Sustantiva el derecho de elegir a los miembros de su staff, porque quiere trabajo, resultados. Pero Mónica Díaz de Rivera se equivocó cuando le otorgó a Edurne Ochoa la subsecretaría de Perspectiva de Género, porque de manera inmediata comenzó a recibir quejas sobre por supuesto maltrato de su colaboradora a la base laboral.

De acuerdo a fuentes informativas del más elevado nivel, ante el cúmulo de quejas que llegaron a su escritorio contra Edurne Ochoa, la titular de Igualdad Sustantiva puso más atención en su subsecretaría y descubrió no solamente que maltrataba a la gente, sino –también- graves actos de deslealtad hacia la propia Mónica.

Por ello le pidió la renuncia y, en esta ocasión, no se equivocó, ya que la campaña en twitter lanzada por la ex funcionaria contra ella dejó muy claro que su compromiso y lealtad NUNCA estuvieron con Mónica y, tampoco, con la dependencia de reciente creación que encabeza y que tiene el difícil reto de contribuir a abatir la inequidad y violencia de género, que tanto laceran a México en primer lugar y Puebla en particular.