Rossi A. G. 

· La IBERO realiza el ‘2° Congreso sobre Construcción de Paz con Perspectiva de Género’

· ONU mujeres asegura que la construcción de paz está incompleta si no cuenta con perspectiva de género

· El feminismo no supone la reconstrucción, sino la transformación de las relaciones

Uno de los objetivos fundamentales para la reconstrucción del tejido social posterior a un conflicto armado es tener acceso a la verdad para procurar justicia, ya que es importante para las comunidades conocer lo que pasó, señaló Victoria Sandino, otrora integrante del Consejo Político Nacional de las FARC.

La también senadora por el partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común participó en el ‘2° Congreso sobre Construcción de Paz con Perspectiva de Género’, organizado por la Mtra. Elvia González del Pliego, coordinadora del Programa de Asunto de Género de la IBERO, en donde explicó que cuando termina un proceso bélico es necesario reconocer las causas que lo generaron porque es el punto de partida para alcanzar la verdad, la más ‘sacrificada’, dijo, además de la justicia, “es lo que la gente busca y para las mujeres esto tiene un valor determinante”, enfatizó la líder feminista.

“Es necesario que la gente tenga esa explicación y esto significa desarrollar una narrativa nueva. Particularmente, las feministas estamos involucradas, comprometidas, con acceder y construir una nueva historia de los hechos. Es un paso importante porque conocer lo que ocurrió es fundamental para acceder a la justicia y para que exista un aspecto que es central en la resolución de los conflictos: el tema de la reconciliación”, señaló Sandino.

Añadió que la reconstrucción del tejido social pasa por un cambio en el imaginario y en la cultura, a partir de la mirada de las comunidades, y en conocer las causas que originaron el conflicto, casi siempre relacionadas con las problemáticas sociales.

“Las transformaciones las generan las sociedades, las comunidades, los territorios, pero quien debe garantizarlas, así como los derechos plenos, son los Estados”, explicó la exguerrillera colombiana.

En ese sentido, las mujeres mexicanas tienen un rol fundamental para encontrar los elementos de la verdad, el acceso a la justicia, a la garantía de derechos económicos, sociales y la superación de la cultura patriarcal que oprime y que violenta.

Por su parte, la Mtra. Magda López, integrante del Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP) Programa por la Paz -una fundación sin fines de lucro creada por la Compañía de Jesús en Colombia- , manifestó que el potencial de las iniciativas de mujeres en la reconciliación interpersonal, comunitaria y política -en su apuesta ética del cuidado-, debe ser una oportunidad de aprendizaje universal que permita reconstruir sobre lo destruido.

“La reconciliación vista desde el feminismo supone no la reconstrucción, sino la transformación de las relaciones entre géneros que haga posible y duradera la paz”.

La construcción de paz con perspectiva de género

La Mtra. Belén Sanz Luque, representante de ONU Mujeres México, señaló que la construcción de paz está incompleta si no cuenta con perspectiva de género, como ha pasado en diferentes países.

Si no se toma en cuenta esta visión, “la verdadera pacificación de las mujeres y su liderazgo está incompleta, y no responde a las posibilidades de terminar los conflictos y de generar sensibilidad”, explicó Sanz.

Destacó que esta Oficina cuenta con un marco normativo internacional robusto en materia de igualdad de género para la construcción de la paz, la prevención de los conflictos y la creación de modelos con un enfoque de seguridad incluyente, producto del gran impulso de las mujeres en distintas partes del mundo.

“Las mujeres en el mundo seguiremos luchando por la garantía plena de los derechos, pero sobre todo por nuestra emancipación, por una vida libre de violencias, que ofrezca condiciones de igualdad con el resto de la sociedad. Seguiremos luchando, pero es responsabilidad del Estado garantizar esos derechos a la sociedad y a las mujeres que históricamente han sido discriminadas y violentadas”.