La Dra. Jimena de Gortari

Coordinadora de Investigación de la IBERO, reflexiona sobre la situación de la investigación y la generación del conocimiento

Ante la acusación de la Fiscalía General de la República (FGR) en contra de 31 científicas y científicos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), la Dra. Jimena de Gortari Ludlow, coordinadora institucional de Investigación de la Universidad Iberoamericana, nos compartió parte de lo escrito en su columna publicada en Opinión 51 En la mira: la generación del conocimiento, citando que “se está promoviendo la persecución de quienes formaron parte del Foro Consultivo, tachándoles de ser un grupo de orden criminal, muchos de ellos investigadores e investigadoras que han expresado el malestar de una administración que se ha dedicado a dar bandazos, y tratar de acotar el trabajo de investigación a sus intereses particulares”.

Añadió que se siente “parte de esta comunidad por historia personal y por vocación, considero fundamental el derecho a la libertad de creación pensamiento y expresión para todos los temas de investigación así como la promoción y el fortalecimiento del trabajo de la comunidad científica del país, sin discriminaciones, ni revanchismos”, citó la académica de tiempo de la IBERO.

La investigadora a través de su columna hizo un llamado a “tomar conciencia sobre las acusaciones que imputan a los 31 científicos y científicas, sobre dejar atrás las rencillas y hacer comunidad. Sobre formar desplegados y mostrar solidaridad con quienes están en la mira, ojalá entendamos que la generación del conocimiento posibilita un mejor país para la ciudadanía en su conjunto y que lo que ocurre es una amenaza para alcanzar este fin”, escribió para su columna en Opinión 51, llamada así porque en México el 51% de la población mexicana está compuesta por mujeres, pero a pesar de eso están poco representadas en los espacios de opinión, es por ello que se agruparon 80 plumas de diferente perfil para construir esta plataforma.

De acuerdo con De Gortari, la investigación que se está haciendo en el país está condicionada, a través de la falta de apoyos que antes se tenían, con la situación de los y las becarias Conacyt en el extranjero o los recortes en becas al Programa Nacional de Posgrados de Calidad (PNPC) y con la situación de los centros de investigación que surgieron como una respuesta a la saturación de las universidades públicas en su momento.

“Hay un temor desde el ámbito científico a decir las cosas, así como preocupación por la administración de este órgano. Es preocupante que se diga que la investigación que se hace en las instituciones privadas tiene un interés diferente al que se hace en públicas. Todo esto parece estar encaminando a una falta de libertad de la investigación”, alertó la docente del Departamento de Arquitectura de la IBERO.

Recordó que la investigación ayuda en la resolución de problemas de la sociedad, siempre en la búsqueda de tener beneficios a corto, mediano y largo plazo. Muchas veces los impactos no pueden ser medidos en términos cuantitativos, todo lo que hacen las y los científicos se ven incorporados después. La investigación siempre se está preguntando cosas y genera nuevas preguntas, siempre está evolucionando e idealmente es acorde con las necesidades de los tiempos. Tiene que ver con el engranaje entre el aprendizaje y la generación del conocimiento.

Para la autora del libro Guía sonora para una ciudad (2013), en estos momento se tendría que estar hablando y atendiendo problemáticas como la migración, la pobreza, el centro de exterminio, y las condiciones de vida que estamos teniendo, a partir de la pandemia por COVID-19 y el regreso a clases.

“Es grave imputar, agruparles y ponerles el apellido de crimen organizado, así como centrar el odio y el malestar contra un grupo de personas, pues, de alguna forma, se está creando un cierto resentimiento en contra quienes pertenecemos a la comunidad académica. Ninguna comunidad es 100% homogénea, hay opiniones diversas, existen matices, pero formamos parte de quienes contribuimos a la construcción de un mejor país”, dijo.

De Gortari reconoció que es una situación privilegiada formar parte del personal académico de este país y contar con apoyos desde el gobierno federal para hacer investigación, pero es algo que ha costado mucho trabajo construir.

“Pertenecer a centros en donde se genera conocimiento también implica estar en permanente evaluación. Muchos de quienes nos hemos dedicado a la academia y a la generación y divulgación del conocimiento sabemos nuestra responsabilidad con la sociedad”, compartió.

Destacó que en la discusión sobre el Foro Consultivo de Ciencia y Tecnología (FCCyT), algunas personas participantes preguntan falazmente por los resultados de las investigaciones del mismo, cuando su función ha sido otra pues no se trata de un laboratorio, ni de un observatorio, no ha sido un departamento académico, es como su nombre lo indica: un Foro.

La Dra. Jimena de Gortari Ludlow es la coordinadora institucional de Investigación de la Universidad Iberoamericana