Gerardo Cruz Castañeda

Jesús Morales Rodríguez, ahora ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, dejó el cargo con dos recomendaciones de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de Puebla encima, por abuso y descuido de las autoridades penitenciarias que, incluso, originó el fallecimiento de un civil.

Esta semana, última de la administración de Antonio Gali Fayad, el organismo emitió dichas recomendaciones (10/2018 y 12/2018) por hechos ocurridos en 2017 al interior de los Centros de Reinserción Social (Cereso) de la capital, San Miguel, y Xicotepec de Juárez.

Degüella a su pareja

En San Miguel, un interno degolló a su pareja mientras esta se encontraba de visita. El documento refiere que, tras una discusión, el homicida apuñaló con un cuchillo en varias ocasiones a la mujer que de inmediato perdió la vida. Los hechos se registraron el 27 de mayo de aquel año.

“Este dio aviso al policía custodio que le había pegado a su pareja con un cuchillo y que posiblemente ya estaba muerta, (…) encontrándose un cuerpo de una persona del sexo femenino y al efectuar la valoración médica informó que la persona ya no tenía signos vitales”.

La recomendación destaca la omisión de los guardias de seguridad, pues el mismo reo dio aviso de lo ocurrido, ya que ninguno de los uniformados se había percatado.

“Los custodios son los encargados de la vigilancia directa de los internos y de las personas de visita, por lo que la responsabilidad del personal en este caso, deriva de la omisión de brindar los recorridos de supervisión y vigilancia oportuna”

Abuso de custodios

Entre abril y mayo de 2017, la CDH recibió quejas de unos 20 internos de cuatro Ceresos: Puebla, Tepexi de Rodríguez, Tehuacán y Tecali de Herrera, debido a que los custodios violentaron su integridad física.

En diferentes hechos, los internos narran cómo fueron sorprendidos por los elementos de seguridad en diferentes áreas de los reclusorios, para denigrarlos y golpearlos.

“El 27 de abril, aproximadamente a las 11 de la noche, un grupo de custodios irrumpió en las celdas, golpeando a las personas privadas de la libertad que ahí se encontraban; precisando que, tanto el Director, como el Subdirector les indicaron que así serían las cosas de ahora en adelante”, se describe en uno de los casos.

Otro, señala que los “agraviados fueron llevados a áreas distintas a sus dormitorios habituales, donde fueron objeto de golpes y amenazas; si durante la revisión llevada a cabo, se les ordenó a los peticionarios desvestirse, realizar sentadillas y adoptar diversas posturas por al menos 30 minutos”.

El desempeño los servidores públicos señalados como responsables de las violaciones a derechos humanos en esta Recomendación (dirigida al entonces titular de la SSP, Jesús Rodríguez), cita el documento, deben de ser investigados, en atención a que con su conducta pudieron haber incurrido en la comisión del delito de abuso de autoridad.