Abelardo Domínguez
HUAUCHINANGO, Pue.-Sin orden de aprehensión, presentación o de cualquier otra índole, al menos cincuenta policías, (todo un turno que debiera estar en las calles) se presentó en las instalaciones del Recinto Ferial, presuntamente por “órdenes del alcalde” para llevarse detenido al líder de los trabajadores del Departamento de Limpia del Municipio de Huauchinango.
La información, que corrió como reguero de pólvora por redes, comenzó a conocerse luego de que 50 uniformados pertenecientes al municipio de Huauchinango, incluyendo elementos a bordo de varias patrullas municipales, dos patrullas de la policía estatal, así como cuatrimotos, todos preparados con equipo táctico como para un motín, llegaron alrededor de las siete de la mañana al Recinto Ferial donde los trabajadores del Departamento de Limpia se preparaban para comenzar su diaria rutina de recolección de desechos urbanos.
Los uniformados rodearon a los trabajadores de limpia y preguntaron por Carlos Román Williams Jiménez, ya que había instrucciones de presentarlo ante la autoridad superior, lo que motivó los cuestionamientos sobre este descomunal operativo de seguridad y la probable detención.
Algunos especularon que “a lo mejor lo quieren desaparecer”) y no permitieron que se lo llevaran, por ello encerraron a su líder en un vehículo rodeado por los trabajadores para protegerlo, ya que hay una gran desconfianza sobre lo que le podría suceder en caso de ser detenido de forma tan arbitraria.
A las preguntas sobre si existe o llevaban una orden de aprehensión, presentación o de cualquier índole, los uniformados sólo atinaron a contestar que “hay instrucciones de llevarlo a la Presidencia y que allá arregle su problema…”, lo que metió más dudas a los trabajadores de limpia que se aferraron a no entregar al compañero resguardado.
Hasta el momento de redactar esta información la situación se mantenía en lo mismo, un jaloneo de sí y de no, pero en los hechos decididos a defender a su compañero.
Todo hace ver, según dijeron los trabajadores de limpia, que se trata de una arbitrariedad más orquestada por el alcalde Gustavo Vargas Cabrera que desde el inicio de su administración nunca dotó de los más elementales recursos al Departamento de Limpia y provocó una serie de despidos injustificados en varias ocasiones a lo largo de su mandato, que provocaron paros y manifestaciones que le ganaron del vulgo el apodo de “Ecoloco Vargas”, ya que en varias ocasiones el pueblo ha quedado inmerso en un mar de basura, mugre, contaminación y proliferación de plagas.
Se desconocen los presuntos delitos en que hubiera incurrido Williams Jiménez, pero más sorprende a la población que el operativo orquestado por una cincuentena de policías uniformados, patrullas, cuatrimotos y toda clase de equipo táctico se haya destinado para detener asegurar y presentar a una sola persona, sobre todo a un empleado municipal, a un barrendero, ante alguna autoridad competente por una falta administrativa o de cualquier otra índole.
Se esperaría que la autoridad municipal haga público algún comunicado oficial para informar a la ciudadanía sobre esto que se calificaría como exceso de fuerza y alarmó a la población, toda vez que los problemas de inseguridad se han visto aumentados a raíz de la suspensión temporal de medio centenar de uniformados mandados a su casa, como para que ahora toda la fuerza municipal de Seguridad Pública sea usada como garrote político contra una sola persona, que pudo haber sido llamado por medio de un oficio o un propio, para presentarse ante sus superiores.