Jorge Barrientos
Decenas de fieles católicos acudieron la mañana de este viernes para visitar al Señor de las Maravillas en el Templo de Santa Mónica, como lo dicta la tradición de cada tercer viernes de Cuaresma.
Desde temprana hora, feligreses realizaron fila para ingresar al Templo de Santa Mónica, ubicado en la Calle 5 de mayo esquina con la 18 poniente de la ciudad de Puebla, para celebrar a la imagen que es considerada como la más milagrosa de Puebla: Señor de las Maravillas, donde sólo se permite un 30 por ciento de aforo, debido a la pandemia de Covid-19, mucha gente se quedó afuera.
Ante la alta respuesta de la gente, se aplicaron los protocolos sanitarios correspondientes para evitar contagios de Covid-19 como la sana distancia entre las personas, aplicación de gel antibacterial, aforo reducido en el templo y el uso de cubrebocas todo el tiempo.
Por lo anterior los fieles no podían permanecer más de 10 minutos al interior de la iglesia, lo cual ayudó a que la afluencia avanzara sin contratiempos.
Recordemos que el Señor de las Maravillas cuenta con dos celebraciones a lo largo del año, la que se realiza cada tercer viernes de Cuaresma y la del 1 de julio.
A lo largo de este viernes se les permitió a los fieles formarse para ingresar con todas las medidas de sanidad, como el uso obligatorio de cubrebocas, aplicación de gel y sanitizante, toma de temperatura y sana distancia, para que vieran por algunos minutos una de las imágenes más visitadas y venerada por los poblanos y turistas.
La imagen del Señor de las Maravillas fue elaborada en el siglo XVII y representa una de las caídas que sufrió Cristo en su camino hacia la cruz.