Roberto Desachy Severino

Elemental, rústico como es, el presidente de la Junta de Coordinación Política en el Congreso local, el defeño Gabriel Biestro Medinilla no ha mostrado el menor tacto ni mesura a la hora de imponer de manera unilateral sus decisiones en dicho órgano.

Así, pese a haber sido presidente estatal de Morena (un partido que se presume de izquierda), Biestro Medinilla le negó a la comunidad LGBT el derecho al matrimonio igualitario y, sin disimular sus intenciones, colocó a Francisco Romero Serrano al frente de la Auditoría Superior del Estado (ASE), pese a su nula experiencia en el sector público y/o en la vigilancia del dinero público: Gabriel Biestro y su mayoría de Morena en el Congreso de Puebla: los defensores políticos del conservadurismo católico

Por lo mismo, todo el mundo da por hecho que la mayoría de Morena en la Legislatura estatal dejará a Gilberto Higuera Bernal al frente de la Fiscalía General de Puebla (FGE), aunque en los círculos de los abogados circula la versión de que hay un “caballo negro” que podría detener la permanencia de dicho funcionario.

El “caballo negro” sería el abogado Guadalupe González Vargas, quien se desempeña en el Poder Judicial de la Federación (PJF) como secretario del Tercer Tribunal Colegiado y, al parecer, es bien visto tanto por Casa Aguayo como en la Ciudad de México. Otro factor a su favor es el contar con estudios de Maestría y su papel como académico en la BUAP y en la Universidad Leonardo Da Vinci: Guadalupe González Vargas

Además, contra el supuesto favorito a permanecer en la FGE, Gilberto Higuera Bernal, puede pesar –y mucho- el que haya sido puesto al frente de la dependencia en la gestión del ex gobernador Tony Gali Fayad y su presunta vinculación con Genaro García Luna, el ex “súper policía” de Felipe Calderón hoy caído en desgracia: Gilberto Higuera se registró para continuar al frente de la FGE

SIGUE LA GUERRA DE BIESTRO Y ROMERO SERRANO CONTRA LA BUAP

Como ya se ha señalado en diversas ocasiones, resulta totalmente irracional la guerra de Biestro Medinilla y el titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE), Francisco Romero Serrano, contra la BUAP y quien la encabeza, el rector Alfonso Esparza Ortiz: Gabriel Biestro ataca a la BUAP

Mientras algunos funcionarios de la administración estatal, como los titulares de Gobernación y del Trabajo, David Méndez Márquez y Abelardo Cuéllar, parecen haber optado con sensatez por ya no confrontarse –al menos abiertamente –con quienes encabezan la gestión universitaria, incluyendo el Consejo, Romero Serrano (se entiende que con el aval de Gabriel Biestro) amagó con multar a la BUAP por oponerse a lo que llamó “auditoría preventiva”.

Más allá del monto simbólico de la sanción (8 mil pesos), lo que queda claro en la actuación de la ASE y Gabriel Biestro es la intención de profundizar la disputa, de exhibir a las autoridades universitarias y dejarles claro que “con nosotros se cuadran o se cuadran”, pese a que Alfonso Esparza y la gran mayoría de consejeros de la BUAP ya aseveraron una y otra vez que no permitirán ataques a la autonomía universitaria y calificaron al coordinador legislativo de Morena como el enemigo número 1 de la comunidad.

Los ataques que el poder legislativo local –con mayoría morenista- lanza contra la máxima casa de estudios de Puebla han sido condenados por un sector de la política nacional, como lo ratificó el hecho de que la semana pasada dos diputados federales le hayan exigido a la ASE respetar la autonomía universitaria: Diputados federales independientes exigen a Romero Serrano respetar la autonomía de la BUAP

Pero es obvio que persiste la polarización política en Puebla y el país y que está muy enrarecido el ambiente en algunas cúpulas del poder. Y eso se recrudecerá conforme se aproximen los comicios concurrentes del 2021: Consejo Universitario BUAP acusa a Gabriel Biestro de querer violar la autonomía universitaria