Población entre 15 a 20 años la que más consume alcohol: CIJ Tapachula

René R. Coca.

Durante el 2018 se atendieron a 150 pacientes voluntarios.

Creció el número de mujeres consumidoras.

Aunque existe el consumo de sustancias adictivas, la que más se ha incrementado es el alcohol donde la población de entre 15 a 20 años es la que tiene más problemas por el consumo etílico, mientras que de los 150 pacientes atendidos de manera voluntaria, 30 fueron mujeres y ello habla del aumento de personas femeninas atrapadas por esta sustancia adictiva, informó el Centro de Integración Juvenil (CIJ) en Tapachula.

La Directora del CIJ en esta ciudad, Ana Lydia Ovando Gordillo informó que el alcohol es la sustancia con la que las personas tienen mayor contacto y muchas de ellas quedan atrapadas en la adicción, ya que durante el año 2018 se tuvo un registro de 150 pacientes que asistieron voluntariamente a la institución a solicitar apoyo, mismos que tuvieron asistencia psicológica, médica y de otra índole para ayudarlos a permanecer sobrios.

La entrevistada comentó que en consulta externa se atendieron a población entre los 15 a 20 años de edad mayormente, edades que indican que son jóvenes que tienen contacto con el alcohol aun cuando están en etapa de preparación escolar; sin embargo se han atendido también a niños que comienzan a beber desde los nueve o 10 años, edades muy preocupantes.

Ovando Gordillo expuso que las sustancias adictivas que prevalecen en Tapachula son en primer lugar el alcohol, en segundo término el cigarro, en tercero la marihuana y el cuarto la cocaína, aunque otro dato preocupante es que el número de mujeres consumidoras va en aumento, ya que el 20 por ciento de los pacientes son del sexo femenino, lo que implica que tanto hombres como mujeres tienen los mismos riesgos de adquirir la adicción.

Finalmente, exhortó a la población en general a que eviten adquirir alguna sustancia nociva que genere adicción, pero que en caso de ya estar enfermos, puedan acercarse al CIJ Tapachula, quien puede apoyar a las personas adictas o bien canalizarlas a otras instituciones de ayuda, donde lo importante es reconocer primero que se tiene un problema y luego trabajar para salir de la enfermedad.

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