Mundo Rural

Hipólito Contreras

México es un país de jóvenes, ellos están por todos lados y en las diversas actividades, desde un bolero hasta un gerente de una institución privada, o en un alto cargo de gobierno o partido político. Ser joven hoy en este tiempo es tener entre 18 y 45 años de edad gracias a que la expectativa de vida ha crecido de manera general, aun con todos los problemas que enfrentamos.

Nos sabemos la estadística pero si la población de este país es de aproximadamente 130 millones de personas, es muy probable que el 51 por ciento por lo menos son jóvenes, es decir, más de 65 millones de personas se les cataloga como jóvenes.

Pues bien, ahí en los jóvenes está una poderosa fuerza que tiene el país y que bien aprovechada puede llevar a las grandes transformaciones del país. Los jóvenes mueven el país, mueven el mundo y pueden mover a México y llevarlo a un nivel de desarrollo impresionante.

Si en este nuevo gobierno los jóvenes son impulsados con políticas públicas en su beneficio, mañana vamos a agradecerles lo que hicieron por México.

Por supuesto que podría decirse que antes que los jóvenes están los niños de este país y que se debe trabajar para crezcan sanos, fuertes, tengan un ambiente bueno, estudien y que lleguen a ser grandes hombres y mujeres al servicio de sus comunidad, su estado y su país

Claro que el Estado mexicano debe de mirar hacia los niños y niñas de este país, debe haber políticas públicas para proteger en todo a este importante sector de la población.

Sin embargo, los millones de jóvenes desde los 18 hasta los 45 años ya están ahí esperando respuestas del nuevo gobierno, ellos ya no son niños, son adultos jóvenes, están en la etapa más grandiosa de la su vida, en su etapa más productiva, con muchos sueños y proyectos.

Este nuevo gobierno llamado de la cuarta transformación debe enfocar sus baterías hacia los jóvenes de México, escucharlos y atenderlos.

No hay una sola actividad en México en donde no estén los jóvenes, ellos y ellas están en todos lados, ellos ellas hacen posible la producción de este gran país, ellos y ellas mueven las máquinas de todo tipo, ellos y ellas hacen caminar las empresas, las instituciones, las organizaciones, los partidos políticos, ellos y ellas hacen arte, cultura y deporte, ellos y ellas producen los alimentos que el país necesita, ellos y ellas producen todo lo que necesitamos en la vida diaria, ellos y ellas son el motor de este gran país.

Si esto y más hacen los jóvenes de México el gobierno debe de su aliado, su protector, les debe de crear políticas públicas que estimulen su desarrollo y crecimiento. El gobierno les debe dar todas las oportunidades de estudio y de trabajo, todos deben ser incluidos.

Si lamentablemente miles de jóvenes mexicanos se van por el camino de la delincuencia o abandonan el país, no es porque les guste, no para nada, sino porque no han tenido las oportunidades para desarrollarse, porque han tocado puertas y se las han cerrado, porque cuando piden justicia no son escuchados, cuando piden trabajo les ofrecen miserias y cero apoyos de ley.

Ellos, los jóvenes no eligen la delincuencia como forma de vida, es el medio, las condiciones, el sistema, los que los empuja a la delincuencia, hay que cambiarles esas condiciones y ofrecerles buenas perspectivas de crecimiento.

Si este nuevo gobierno voltea hacia los jóvenes y los atiende con políticas inteligentes, revolucionarias, modernas y capaces, México avanzará hacia el desarrollo estabilizador, avanzará hacia un México solidario, en paz y tranquilidad.

Los jóvenes de México son trabajadores, capaces, pacíficos y solidarios, nunca violentos, ayúdalos señor Presidente y equipo de gobierno, ayúdalos señor gobernador, ellos no le fallaran, se lo aseguro.