Rossi A. G.

· La internacionalización del Premio es de suma importancia para la Universidad de Deusto, creadora del mismo.

Es necesario la energía de todas y todos para visibilizar el talento y construir sociedades más igualitarias y justas, y eso es lo que persigue hacer el ‘Premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga’, comprometido con la igualdad y justicia a favor de las mujeres, señaló la doctora María Jesús Pando, vicerrectora de Vinculación de la Universidad de Deusto.

En el lanzamiento del ‘Premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga. Capítulo México’, realizado en la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, dijo que la lucha por la igualdad de las mujeres es un principio democrático irrenunciable de las sociedades avanzadas; tan frágiles últimamente. “Y a las instituciones jesuitas (como la IBERO y Deusto), que siempre han estado trabajando en las fronteras, probablemente les corresponda estar también en esta frontera; porque hablamos de inclusión, de diversidad y, sobre todo, de justicia”.

A nombre de su universidad, la Dra. Pando agradeció “la extraordinaria, entusiasta y generosa acogida que hemos tenido por parte de nuestros colegas” de la IBERO Ciudad de México y de la IBERO Puebla, que se sumaron a Deusto en el lanzamiento del Premio, por primera vez en México y fuera de España, en lo “que esperamos será una fructífera colaboración entre tres universidades hermanas”.

Recordó que, ante la falta de referentes femeninas para las niñas y jóvenes en la ciencia y la tecnología, y la baja tasa de vocaciones en ese ámbito, que contrasta con la creciente demanda de profesionales en ese sector, el ‘Premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga’ fue creado en 2014 por un grupo de profesoras y profesores de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Deusto, con el objetivo de visibilizar el talento femenino profesional y académico relacionado con la tecnología y la ciencia.

Un Premio para el que es fundamental contar con el apoyo de la comunidad científica y educativa (desde la primaria hasta la universidad), y también de las empresas e instituciones de los ámbitos profesionales de la ciencia y la tecnología. “Por eso surge también como un proyecto de colaboración para el que, desde la universidad, solicitamos apoyo y compromiso de quienes realmente pueden hacer realidad en su día a día el reconocimiento, la visibilización y la puesta en valor del trabajo de cada vez más mujeres en ámbitos que hace 20 años eran insólitos para ellas”.

“Queda mucho por hacer, pero iniciativas como esta, que vinculan al mundo académico y al mundo empresarial, son pasos modestos pero importantes para compartir la experiencia y liderazgo de las mujeres. Y para que se vaya construyendo un modelo, un referente, y cada vez haya más niñas y jóvenes cursando estudios de ingeniería y tecnología, y pudiendo desarrollar brillantes carreras profesionales”.

Por último, la doctora resaltó que para Deusto es muy importante la internacionalización del Premio, pues en los próximos años toda la labor de esta universidad ha de girar necesariamente sobre la internacionalización, la digitalización y la responsabilidad social entorno al cuidado de la Tierra y las desigualdades.

El ‘Premio Ada Byron’ es una iniciativa para trabajar juntos, en el mundo y con una vocación transformadora. “Y qué hay más transformador que empezar a allanar el camino para que mujeres y niñas tengan cada vez menos obstáculos para acceder a las carreras tecnológicas, para que se sientan reconocidas como mujeres y científicas, ingenieras o tecnólogas, y para que se vayan derrumbando poco a poco esas barreras que a veces son tan difíciles de visibilizar, pero que ahí siguen, insistentes”.