Hipólito Contreras

De acuerdo al análisis del INEGI y el Coneval (Consejo Nacional de Evaluación de las Políticas de Desarrollo Social) más del 50 por ciento de los mexicanos mantienen un estatus de pobreza desde hace algunas décadas, situación que los hace más proclives al contagio de COVID-19.

Agrega el estudio que más de 20 millones de personas padecen pobreza extrema, son segmentos de población vulnerables al ataque de enfermedades conocidas o que cíclicamente se presentan, y padecimientos extraordinarios, como es el caso del virus SARS-CoV-2.

Se estima que el crecimiento económico de México sufra este año, por tercer año consecutivo, una reducción del Producto Interno Bruto (PIB), del 9 por ciento, lo cual es calificado como catastrófico, sobre todo que el aumento del PIB en las últimas cuatro décadas anteriores al presente gobierno fluctuó entre el 2 y 2.5 por ciento anual.

En el sector primario del país, sucede algo extraordinario. Sabemos que el crédito oficial está por los suelos; que desmantelaron los servicios técnicos y que la reducción del presupuesto federal en los últimos tres ejercicios, dos ya cumplidos (2019 y 2020) y el correspondiente al presente año, la maquinaria agrícola ha envejecido; no hay plan de nuevas inversiones para renovación de equipos, y las importaciones de granos crecen año tras año.

El único crédito que hay para el campo, es el de la banca comercial, cuyos intereses, con la complacencia del gobierno, son altos, aun pagando los créditos el banco le sigue cobrando intereses a los productores.

Lo que ayuda mucho a las comunidades no es el apoyo del gobierno sino las remesas de los paisanos, que en el 2020 superaron los 40 mil millones de dólares.

Por el alto costo de productos básicos como la leche, el consumo per cápita es de apenas 250 mililitros cuando la FAO recomienda 500 mililitros por los menos al día.

Desde hace muchos años la FAO calificó a la leche de bovino como el alimento más completo en cuanto a elementos nutritivos. Un vaso de leche (200 ml) aporta aproximadamente 30 por ciento de la dosis diaria de calcio recomendado, nutriente que ayuda a formar y mantener huesos y dientes fuertes.

Otorga un porcentaje importante de las recomendaciones diarias de otros nutrientes fundamentales, como el Potasio, necesario para el tono y contracción de los músculos, Fósforo, que ayuda a fortalecer los huesos y genera energía enlas células del cuerpo; y aproximadamente un 15 por ciento del requerimiento diario de proteínas de alto valor biológico, nutrientes necesarios para la formación de la estructura de nuestras células.

De la misma forma, un vaso con leche provee al organismo de otros nutrientes necesarios para su correcto funcionamiento, como Vitamina D, Vitamina A, Vitamina B12 y otras vitaminas del complejo B (Vitamina B2 y Niacina).