PRNewswire
El asma es una afección crónica causada por la inflamación de las vías respiratorias que afecta a 339 millones de personas en el mundo. Datos del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) señalan que 8.5 millones de mexicanos la padecen y de estos entre el 5 y 10% tienen asma grave, lo que equivale casi al número de contagios confirmados de COVID-19 en el país durante la pandemia[1].
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que el asma grave ha causado 417,918 fallecimientos en todo el mundo y ha provocado la pérdida de 24,8 millones de años de vida ajustados en función de la discapacidad.
Muchos pacientes con asma grave además del tratamiento de mantenimiento estándar requieren corticosteroides orales recurrentemente como mantenimiento o método de rescate durante una crisis; este tipo de tratamientos puede provocar efectos adversos a largo plazo.[2]
Además, es importante considerar que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) manifestó que los pacientes con asma son parte del grupo de riesgo que puede tener mayores complicaciones por contraer Covid -19, pues al afectarse las vías respiratorias pueden generarse crisis que pueden agravar el cuadro.
Ante estas necesidades y con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes, AstraZeneca trae a México Benralizumab[3], su primer biotecnológico para pacientes adultos con asma grave eosinofílica que no se controlan adecuadamente. Esta terapia, es un anticuerpo monoclonal que mejora el control total de la enfermedad al mismo tiempo que disminuye el riesgo de efectos adversos derivados de la toma continua de esteroides orales.