CADENA POLÍTICA

• Un alimento con posibilidad de influir en la longevidad ha cobrado protagonismo: los frijoles.

Además de su reputación culinaria, estos granos pueden ser clave en la duración de la vida humana, según un análisis reciente que los asocia con la longevidad cuando se consumen junto a otros granos.

La indagación se enfoca en las “zonas azules”, áreas geográficas que albergan comunidades centenarias. Dan Buettner, experto y empresario, ha explorado estos lugares y subraya la relevancia de los granos en sus dietas. Entre estas zonas se encuentran Ikaria, Grecia; Okinawa, Japón; Nicoya, Costa Rica; Loma Linda, California; y la isla italiana de Cerdeña.

En Cerdeña, por ejemplo, los garbanzos y las favas son esenciales. Los garbanzos son el ingrediente central de una sopa minestrone, consumida en más de una comida, permitiendo la ingestión de beneficios dos veces al día. En estas regiones, los granos y legumbres forman parte esencial de la rutina alimentaria.

La familia Melis de Perdasdefogu, Cerdeña, destaca en el tema de longevidad. Buettner comparte que sus integrantes han vivido una vida excepcional, siendo el alimento estrella una sopa minestrone, acompañada de pan de masa fermentada y vino tinto. Esta receta ha sido compartida por uno de los miembros de la familia Melis.

La riqueza nutricional de las legumbres es uno de los motivos detrás de su papel en la longevidad. Cobre, hierro, magnesio, potasio, ácido fólico, zinc, lisina, proteína y fibra son algunos de los nutrientes presentes. La fibra, en particular, tiene efectos positivos en la salud intestinal, la inflamación y la función inmunológica.

La diversidad en el consumo de distintos tipos de frijoles maximiza los beneficios nutricionales. Por ejemplo, el aduki o frijol mungo rojo es rico en fibra, mientras que las habas son una fuente de luteína antioxidante. Los frijoles negros y rojo oscuro aportan potasio, y los garbanzos contribuyen con magnesio.

La combinación de frijoles con granos integrales crea una proteína integral, similar a la de origen animal. En distintas “zonas azules”, como Nicoya, Costa Rica, se destaca el Gallo Pinto, plato nacional que une frijoles y arroz de manera beneficiosa para el organismo.

Beneficios de las legumbres
Los beneficios de las legumbres están respaldados por estudios científicos. Su consumo puede reducir el colesterol, estabilizar los niveles de azúcar en sangre y prevenir enfermedades como la diabetes tipo 2. Además, ayudan en la pérdida de peso.

La asequibilidad y la capacidad de cultivar granos en diversos suelos hacen de ellos una opción económica y sustentable. Buettner, a través del Proyecto Zona Azul, trabaja en la implementación de cambios en las comunidades para promover la longevidad y la salud, enfocándose en la inclusión de frijoles y granos integrales como base alimentaria.