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• La metodología que usan en el salón de clases a través de actividades de juego ha demostrado su efectividad y despertado el interés de los menores.

México, CDMX.- La implementación de actividades lúdicas y de juego en el salón de clases ha demostrado ser una práctica efectiva que se traduce en un mayor interés del alumno por aprender, promueve su creatividad y desarrolla su capacidad para hablar una segunda lengua adaptando los conceptos y estructuras propias del idioma, sin tener que traducir, afirmó Carolina Rivero, Project Manager de Participe Learning.

Esta organización convoca a docentes de México y América Latina a recibir una beca para dar clases en Estados Unidos, y la estrategia que siguen los docentes mexicanos y latinos ha tenido tan buenos resultados, que los maestros de otras materias y directivos se acercan para conocer sus prácticas y actividades.

Luego de más de 10 años de experiencia en la enseñanza del idioma español en escuelas de educación básica en Carolina del Norte, Carolina Rivero, afirmó que el uso de herramientas tecnológicas, el uso de actividades lúdicas que desarrollan la imaginación y el juego, ha demostrado mayor eficacia en el salón de clases.

Para Rivero, el docente del idioma español en el sistema escolar estadounidense desarrolla una gran capacidad de liderazgo, al posicionar su asignatura en el mismo nivel de importancia de las demás. Para captar el interés en los alumnos, por ejemplo, ella desarrolló programas con un alto componente de actividades de juego, lo que ha generado que a los alumnos les encante acudir a aprender el español como una segunda o tercera lengua.

“Aprenden de la cultura, de las costumbres e historia, y del significado de la lengua, jugando o experimentando, y eso ha generado un gran interés en los alumnos, además de desarrollar la capacidad de poder expresarse en una segunda lengua adaptando los conceptos y estructuras propias del idioma sin tener que traducir o transferir”, afirmó Rivero.

Los resultados son tan positivos, que los docentes mexicanos y de otros países de Latinoamérica cada día son más solicitados para que acudan a dar clases a los Estados Unidos, como complemento a los educadores locales. Por eso Participe Learning ofrece oportunidades para lograrlo.

Acerca de Participe Learning

Desde 1987 la organización Participate Learning ofrece a los docentes la oportunidad de ir a trabajar a los Estados Unidos en escuelas de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia en las mismas condiciones que los maestros de ese país y también da la oportunidad de que continúen su preparación académica en ese país. Cada año alrededor de 1,000 profesores de diferentes países acuden a ese país apoyados por la organización.