Por Mino D’Blanc

La película “Al límite de la venganza” se estrenará en las salas cinematográficas de la república mexicana el jueves 24 de marzo del presente año a través de Cinépolis Distribución.

Dirigida por Conor Allyn, es protagonizada por Jake Allyn, quien es una joven promesa del séptimo arte. Cuenta con un muy buen elenco de actores tanto mexicanos como internacionales entre los que destacan Frank Grillo, Jorge A. Jiménez, Esmeralda Pimentel, Alex MacNicoll, Ofelia Medina, Andie MacDowell, George López, entre otros.

Sinopsis: en un tradicional rancho texano vive la familia Greer, quienes luchan por mantener su negocio y a la vez cuidarse de todos los conflictos que conlleva vivir en este punto fronterizo: inmigrantes, tráfico de armas, drogas y abuso de poder. En uno de tantos enfrentamientos, Jackson (Jake Allyn) dispara por error en contra de un niño migrante y le arrebata la vida; de esta manera, Jackson emprende un viaje hacia México para huir de la policía de Estados Unidos y del padre (Jorge A. Jiménez) que busca venganza por haberle truncado la vida a su hijo. Ya en México llegará a Guanajuato para buscar redención de aquel acto irreversible. Culpa, miedo y venganza son los elementos que envuelven a esta travesía entre dos tierras cercanas, pero aparentemente muy distintas.

“Al límite de la venganza” confronta los dos puntos de vista de la migración: la mirada de los que llegan y la de los que se van. Una dualidad tajante que se ha vivido durante años y ha dejado miles de historias por contar; solo que en esta ocasión es un estadounidense que cruza la frontera de forma ilegal para huir de la justicia.

El director Conor Allyn, quien también es reconocido por su participación como productor ejecutivo de la película mexicana “Ya no estoy aquí” (2019), enfatiza en “Al límite de la venganza” la importancia de las relaciones familiares y el proceso de la pérdida, emociones que a diferencia de las situaciones físicas humanas, no conocen fronteras geopolíticas. Así, la película es un retrato vivaz de la condición humana en circunstancias que implican forzosamente ver al otro lado como un enemigo.