Video muestra el lanzamiento de la “Bomba del Zar”: El arma más potente de la historia

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Un impresionante video fue publicado recientemente por el gobierno de Rusia, donde se evidencian detalles de cómo fue el lanzamiento de la denominada “Bomba del Zar”, el arma más potente creada hasta el momento, que fue utilizada el pasado 30 de octubre de 1961, sobre el mar de Barents, en el Océano Ártico.

El video, que dura cerca de 40 minutos, muestra cómo fue la preparación de la nave que haría el lanzamiento, el vuelo hacia la zona de guerra y finalmente el lanzamiento de esta bomba de hidrógeno RDS-220, cuyo nombre en código era Iván.

Guerra Fría
El contexto de esta fuerte detonación, se da durante la Guerra Fría, que inició con el fin de la Segunda Guerra Mundial, luego de que Estados Unidos destruyera Hiroshima y Nagasaki (ambas ciudades de Japón), con las primeras bombas nucleares de la historia.

Desde allí, las principales potencias del mundo no tardaron en acceder a la tecnología de la bomba nuclear, que para ese entonces, era comúnmente utilizada en lanzamientos de prueba para demostrar el poder de la fuerza militar de cada nación. Es por esto que Rusia creó la Bomba del Zar, el arma más potente creada hasta el momento.

Debido al enorme tamaño de “Iván”, esta bomba no iba a ser de uso real, de hecho, fue creada principalmente con motivos de investigación científica y propagandísticos debido a la intensa rivalidad política, económica, social, militar e informativa en ese momento.

Una explosión increíble
El piloto Andréi Durnóvtsev fue el encargado de lanzar la Bomba del Zar, en una zona de pruebas del mar de Barents (Rusia) desde una altura de 10 kilómetros. La bomba explotó antes de tocar el agua y se produjo una inmensa figura de “hongo” que podía verse a una distancia de mil kilómetros.

Andréi Sájarov fue uno de los principales artífices de la Bomba, sin embargo, a los pocos meses abandonó su carrera militar tras convencerse del peligro que representaba el desarrollo de estas armas nucleares. Este acto lo llevó a obtener el reconocimiento internacional, ganando el premio Nobel de la Paz en 1975.

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