Debate

Por Roberto Desachy Severino

En menos de una semana el edil suplente de Tehuacán, Andrés Caballero López, pasó del gozo al sufrimiento, porque el viernes 14 de agosto armó una fiesta en el edificio Morelos para festejar su cumpleaños y apenas 5 días después su realidad política le dio un mazazo cuando policías estatales detuvieron a uno de sus aliados coyunturales, al regidor panista Víctor Canaán Barquet: Víctor Canaán Barquet, el panista que pudrió Tehuacán

Quizás el presidente municipal sustituto de Tehuacán no lo sepa, pero la sorpresiva detención de su regidor fue un mensaje directo para él, que festejó a priori y en demasía cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dio entrada a su controversia constitucional contra la desaparición del Cabildo y cuyo grupo político –del Partido Encuentro Social (PES), no de Morena- intentó sembrar en la ciudad la percepción de que se mantendrían al frente del ayuntamiento, pese a tener en contra al Congreso local y, sobre todo, al gobierno estatal.

Aunque sus secretarios particular y del ayuntamiento, Eduardo Guadalupe Correa y José Momox Sánchez, respectivamente, no se lo hayan dicho, su permanencia o no al frente de la administración tehuacanense es un asunto político mucho más que legal. La ambición de poder le cegó y Caballero López nunca asumió que su continuidad o no en el cargo debía ser avalada por el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, quien no confía en él…por sobradas razones.

¿Cómo o por qué debía Miguel Barbosa Huerta confiar en el alcalde suplente de Tehuacán, si Caballero López le dio cobijo, protección a morenovallistas, a gente de José Juan Espinosa y, por si fuera poco, su nonata administración fue defendida por el PES, de Fernando Manzanilla?: Encuentro Social se pronuncia por el respeto a la Ley En Tehuacán, Puebla

DONDE MANDA GOBERNADOR…NO DECIDE PRESIDENTE MUNICIPAL SUSTITUTO

Andrés Artemio le demostró claramente al gobernador que no era de fiar en varias ocasiones: La primera cuando designó como su secretario particular a Eduardo Guadalupe Correa, un rancio morenovallista que fuera mano derecha del finado ex titular de Gobernación y de la SEP en el gobierno estatal 2011-2017, Luis Maldonado Venegas.

También le jugó las contras al mandatario estatal al designar como secretario del ayuntamiento a José Momox, que es gente del diputado local y ex edil de San Pedro Cholula, José Juan Espinosa Torres, quien enfrenta varias acusaciones ante la Fiscalía Anticorrupción y que desde hace tiempo padece el abierto rechazo del barbosismo: Comparece José Juan Espinosa ante la Fiscalía Anticorrupción por presuntamente enriquecimiento ilícito

Soberbia, estupidez, inexperiencia, malos asesores, solamente el mismo Caballero López puede responder por qué cometió tantos errores en tan poco tiempo. El asunto es que el edil suplente de Tehuacán designó como uno de sus abogados para la controversia constitucional contra la desaparición del Cabildo a Jorge Blancarte, que también es cercano a José Juan Espinosa, desde que el “JJ” usufructuaba la franquicia de Movimiento Ciudadano (MC) en Puebla.

Andrés Artemio y sus allegados nunca entendieron que solamente hay un gobernador de Puebla –no 217- y que podía contratar o aliarse con los mejores abogados, consultores, ingenieros, mapaches electorales, chamanes y hasta futbolistas del planeta, pero que su presidencia municipal no valdría nada sin el visto bueno y el apoyo del gobernador Barbosa: Eduardo Guadalupe Correa y José Momox, los verdaderos “presidentitos” de Tehuacán

A estas alturas tal vez ya lo haya entendido…aunque muy probablemente sea demasiado tarde para él.