Debate

Por Roberto Desachy Severino

Durante décadas, en la ortodoxia política del PRIAN, las visitas presidenciales a los estados eran esperadas –en la mayoría de las ocasiones- con ansias por los gobernadores y presidentes municipales.

En muchas ocasiones, la visita del titular del Ejecutivo federal a las entidades no solamente representaba un espaldarazo político para los mandatarios estatales, sino recursos frescos, programas sociales, proyectos de infraestructura en las comunidades.

Pero con el presidente Andrés Manuel López Obrador se acabó esa praxis y, hoy, sus idas a los estados son simbólicas por su permanente tendencia a recortar fondos a las entidades y su persistente negativa a dotarlas de recursos extras: Gobierno federal reduce recursos a Puebla en varios programas

Con el argumento del combate a la corrupción y la austeridad, AMLO ha disminuido notablemente los recursos a los estados, como incluso ha ocurrido durante esta pandemia, durante la cual varios gobernadores se han quejado del nulo o escaso apoyo recibido en el Insabi y la secretaría de Salud federal: Video desde Puebla: Gobernador Barbosa desmintió al Insabi y aclaró que la entidad no es la cuarta que más insumos médicos ha recibido durante la pandemia

Antes, cuando el priato despachaba en Palacio Nacional, los presidentes en turno daban dinero a los gobernadores y alcaldes no solamente como una forma de control político, sino también para afianzar complicidades y apaciguar rebeldías. Pero en la 4T no hay recursos adicionales para los estados ¡ni siquiera durante una pandemia como la que hoy sacude al país!.

NI LA PANDEMIA HIZO QUE LA FEDERACIÓN LIBERARÁ RECURSOS

Ello provocó, incluso, que el pasado 15 de junio 12 gobernadores (del PAN y PRI) reiteraron su rechazo al pacto fiscal federal vigente y demandaron uno nuevo, en una proclama política que el propio AMLO rechazó: Petición de nuevo pacto fiscal cobra fuerza con el impulso de 12 gobernadores

Andrés Manuel López Obrador ha realizado a Puebla, la última en enero pasado, cuando visitó Pahuatlán noviembre pasado, cuando junto con el gobernador Barbosa destacaron los respaldos de sus gestiones a los pueblos indígenas: Gasoductos no pasarán por tierras sagradas: presidente AMLO

También estuvo en noviembre y octubre del 2019 en la entidad, pero en ninguna de esas ocasiones anunció fondos adicionales para Puebla, un programa social específico para los poblanos en posición vulnerable o la puesta en marcha de alguna obra de infraestructura importante para el estado: Desde el Vídeo: En San Miguel Canoa, piden apoyo a AMLO para frenar la deforestación

Así que, mucho me temo, que la visita de AMLO de este día al estado será igual o muy similar a las anteriores; es decir, con un gran festejo, muchas proclamas, parabienes, apapacho político…pero sin el anuncio de recursos extras para Puebla. Ojalá me equivoque.

¡MORENA LANZA UN SOS EN PUEBLA…DONDE SE DESPLOMA CASI 10 POR CIENTO LA POPULARIDAD DE AMLO EN 7 MESES!

AMLO es Morena y Morena es AMLO, así de fácil. Sin estructura ni dirigencia estatal y/o municipal, el partido que hoy gobierna el país, la entidad y las principales ciudades del estado depende –en un elevado porcentaje- de la buena o mala imagen del presidente para llegar al 2021 con alguna posibilidad de repetir en los ayuntamientos y mantener la mayoría en el Congreso local.

Pese a que la elección intermedia concurrente es en el 2021, la realidad es que, según Consulta Mitofsky, entre noviembre del 2019 y mayo de este año Andrés Manuel López Obrador perdió casi 10 puntos de popularidad en la entidad, que en esos meses pasó del 60.1 al 50.3 por ciento.

De acuerdo a la empresa encuestadora de Roy Campos, la aceptación presidencial cayó 9.8 por ciento en Puebla durante los más recientes meses ¡y todavía no se acaba la pandemia y ni siquiera ha comenzado la inevitable crisis económica post covid 19!.

Y AMLO NO ESTARÁ EN LA BOLETA

A nivel nacional tampoco anda muy boyante que digamos la imagen presidencial entre los ciudadanos – pese a las giras que ha retomado López Obrador desde hace 2 semanas – como lo ratifican las mediciones de Consulta Mitofsky, que el 30 de diciembre del 2019 le daban una aprobación del 59.4 por ciento y que, el pasado lunes 15 de junio, le otorgó una calificación del 47.3%, que implica una pérdida de más de 12 puntos porcentuales en 5 meses y medio.

Y aunque la aprobación de AMLO en Puebla (50.3 por ciento) en mayo pasado todavía fue superior –aunque ligeramente- al promedio nacional del 50.1, resulta difícil proyectar que la popularidad presidencial pueda dar un brinco hacia arriba, si se toma en cuenta que el estado es uno de los más afectados por la crisis sanitaria, conflictos políticos y violencia.

Tampoco ayuda a la buena imagen de López Obrador el hecho de que –como ya se ha dicho hasta el cansancio- él y su gobierno no tienen en Puebla ningún proyecto de infraestructura importante y dejaron abandonados a los estados y municipios durante la pandemia: Covid19, la prueba más contundente de que el “pueblo bueno” también se equivoca