Staff/Rossi
· Sergio Ley-López, exembajador de México en China, dijo que el gigante asiático defiende un concepto de seguridad común integral, cooperativo y sostenible
· Para China, la base del conflicto ruso-ucraniano es resultado de las fallas del sistema de seguridad europeo, y la OTAN y Estados Unidos a la cabeza del contexto
Para el exembajador de México en China, Sergio Ley-López, el trasfondo de la crisis ucraniana es la falla en el sistema de seguridad europeo y la persistencia de la mentalidad de una Guerra Fría. Por lo cual, la forma fundamental de resolver el conflicto reside en el alto al fuego, seguido por el diálogo y la negociación, en lugar de un orden basado en reglas, definido unilateralmente de acuerdo con las normas propias de una parte y, aún menos, coaccionar a otros a tomar partido.
Al participar en la conferencia El papel de China frente a la guerra en Ucrania, organizada por el Departamento de Estudios Internacionales, el especialista explicó que para China la base del conflicto ruso-ucraniano es resultado de las fallas del sistema de seguridad europeo, y la OTAN y Estados Unidos a la cabeza del contexto.
Ley-López añadió que también es un recordatorio y una advertencia del frágil equilibrio geoestratégico asiático. En tal sentido, en su ofensiva global, China ha buscado con éxito crear consensos con los países de la región sobre:
- Las disputas hay que resolverlas pacíficamente a través del diálogo y las negociaciones.
- No a las sanciones excesivas que lejos de solucionar problemas, crean nuevos.
- Es necesario mantener el compromiso regional ganado con tanto esfuerzo, cuyas coordenadas más visibles son el desarrollo económico y la estabilidad.
- Resistir la tentación de introducir la confrontación de bloques y la mentalidad de Guerra Fría que sólo eleva más la tensión en Asia.
De acuerdo con el especialista, China defiende un concepto de seguridad común integral, cooperativo y sostenible. Considera que la seguridad de un país no puede lograrse a expensas de comprometer la seguridad de otros. Y que la seguridad regional mucho menos se puede garantizar mediante el fortalecimiento o incluso la expansión de los grupos militares.
“Las preocupaciones de seguridad razonables de todos los Estados deben ser respetadas. En el contexto de las cinco rondas consecutivas de expansión de la OTAN hacia el este, las legitimas demandas de seguridad de Rusia deben tomarse en serio y resolverse adecuadamente. De tal manera que la solución política definitiva pasa definitivamente por un diálogo directo entre Rusia y la OTAN”, explicó.
De acuerdo con Ley-López, China se opone a la jurisdicción de brazo largo y las sanciones unilaterales que no tienen base en el derecho internacional, pues en el contexto de una recuperación económica mundial débil, las sanciones ilimitadas socavarán la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro internacionales, agravarán la crisis alimentaria y energética, y dañarán los medios de vida de las personas en todos los países.
“China no apoya ni apoyará militarmente a ninguno de los contendientes directos en el conflicto, como sí han hecho otros países como Estados Unidos, Australia o la OTAN, porque entiende que eso complica y alarga la solución política. El país asiático ha reiterado que es imperativo que las partes involucradas: Rusia, Ucrania, EUA y la OTAN demuestren voluntad política y encuentren un acuerdo adecuado a las necesidades inmediata y de largo plazo”, dijo.
Valentina González/ICM