MILENIO

El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó que la reforma eléctrica esté en contra del tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

“La reforma eléctrica no contraviene el tratado, al contrario, es para que México tenga todavía más ventajas comparativas, para que lleguen más inversiones y que podamos mantener el compromiso con los usuarios de no aumentar el precio de la luz”, dijo en conferencia de prensa.

Agregó que el tratado “no impide evitar la corrupción en México, no hay nada que tenga que ver con el proteger a empresas para abusar de los usuarios, de los consumidores. Lo que prevalece es un abuso, es un robo, de empresas a toda la población y al erario público”.

El Presidente indicó que estas condiciones fueron gestadas en el pasado, con administraciones anteriores, cuando se modificó la Constitución y las leyes para “saquear con visos de legalidad. Es un acto de corrupción generalizado”.

Puso el caso de Oxxo, cuya empresa paga tres veces menos por la luz de lo que paga una familia en México. “Los dueños de Oxxo eran los que mandaban en México. Había un presidente, había diputados y senadores, pero había un grupo que dominaba, eran los dueños de México o se creían los dueños de México, ese grupo vivía colmado de atenciones y de privilegios como esto”.

Señaló que ese tipo de empresas no pagaban impuestos y tenían injerencia a costa del gobierno, esa corrupción, dijo, produjo una crisis en México.

“La reforma que se está proponiendo es para que se corrija todo eso, que se hizo de manera facciosa, es decir, no para el beneficio de los mexicanos, sino de un grupo. El gobierno tiene que representar a todos”.