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Un ataque ocurrido el sábado en el municipio mexicano de Reynosa, ubicado en el norteño estado de Tamaulipas, dejó al menos 15 personas muertas.

Y aunque no se han dado a conocer las identidades de las víctimas, se sabe que entre ellas hay un taxista, un estudiante de enfermería y un grupo de albañiles.

En un principio las autoridades señalaron que se desconocían los motivos detrás del ataque, perpetrado por varios hombres, aunque la primera teoría apuntaba a un enfrentamiento entre carteles.

Tamaulipas es un estado ubicado en la frontera con Texas, donde operan distintos grupos dedicados al narcotráfico y al tráfico de personas hacia Estados Unidos, como el cartel del Golfo.

Sin embargo, en las últimas horas las autoridades mexicanas han comenzado a desvirtuar esta hipótesis y considerar la posibilidad de que se trató de un ataque indiscriminado contra civiles que estaban en las calles de Reynosa.

“Todo indica que no fue un enfrentamiento (entre carteles), sino que fue un comando que disparó a gente que no estaba en plan de confrontación”, dijo este lunes el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.

AMLO, como se le conoce, señaló que la Fiscalía General de México se hará cargo de la investigación para esclarecer los hechos.

Balazos
El Grupo Coordinación Estatal para la Construcción de La Paz en Tamaulipas, que coordina a las fuerzas de seguridad, informó que los ataques fueron perpetrados por individuos a bordo de varios vehículos, según dio a conocer la agencia de noticias EFE.

Los atacantes abrieron fuego a su paso por las colonias de Almaguer, Lampacitos, Unidad Obrera y Bienestar, de la ciudad de Reynosa.

El incidente, ocurrido poco después del mediodía del pasado sábado 18 de junio, causó la muerte de 14 personas.

“Oyeron los balazos a lo lejos y mi padrastro le dijo ‘mi hijo hay que resguardarse’, así que pidió permiso en una casa para meterse, pero mi hermano y sus compañeros apenas se iban a meter cuando llegaron las camionetas, se pararon enfrente y les empezaron a disparar”, le contó Olga Ruiz, familiar de una de las víctimas mortales, a la agencia de noticias AP.

“Los mataron a sangre fría, a él y a dos de sus compañeros”, agregó.

La balacera provocó la movilización del ejército, la Guardia Nacional, la policía estatal y la fiscalía del Estado, que se desplegaron por toda la ciudad.

Las autoridades también informaron que, tras el ataque, miembros de la Guardia Nacional abatieron a varios de los presuntos perpetradores del asalto.

“Derivado de las acciones de patrullaje y vigilancia se logró detectar a varios sujetos y vehículos que participaron en los homicidios de 14 personas en diferentes colonias de la ciudad de Reynosa”, explicaron en un comunicado.

“Al ser localizados, los individuos opusieron resistencia y agredieron a personal policial, el cual repelió la agresión. Murieron cuatro de los civiles armados”, agregaron las autoridades.

También se reportó la detención de una persona.

“Inédito e inaudito”
Aunque no se ha dado a conocer la motivación, tanto el presidente como las autoridades locales han apuntado a un posible acto indiscriminado.

“Fue un ataque cobarde”, dijo López Obrador el lunes, durante una rueda de prensa.

El procurador de Tamaulipas, Irving Barrios, señaló que se trató de un asalto “inédito e inaudito” contra los ciudadanos de Reynosa.

Es un hecho sin precedentes en la entidad, no existe registro en los últimos diez o doce años”, le dijo Barrios a la periodista Carmen Aristegui.

“De la información que tenemos del seguimiento de los hechos, tenemos que grupos criminales antagónicos al grupo criminal de Reynosa quisieron entrar a causar desestabilidad social disparando a diestra y siniestra, en colonias alrededor del puente Pharr”, agregó.

Por su parte, el periodista Héctor Mauleón, del diario El Universal, señala que los atacantes dispararon “al azar” contra los locales que transitaban por la calle y que no tenían ningún vínculo con grupos delincuenciales.

“Quienes formaban parte del convoy recorrieron cuatro colonias del oriente disparando contra la gente que iban hallando a su paso”, apuntó.

Y detalló: “Trabajadores de la construcción, obreros que reparaban el alcantarillado, un joven enfermero recién graduado, un adulto mayor que caminaba bajo el sol ardiente (y al que tendieron de un tiro en la garganta), el dueño de una tienda de abarrotes y un cliente que hacía compras en el momento en que pasó el comando de sicarios”.

Facciones en pugna
Tanto las autoridades locales como las del gobierno central han señalado se baraja la hipótesis de que fue un ataque indiscriminado contra la población civil, pero que detrás del mismo estarían facciones de grupos criminales que conforman el cartel del Golfo.

Desde 2017, varios grupos regionales dentro del cartel estarían en pugna por el control del territorio, rutas de tráfico de drogas y control de paso de migrantes hacia EE.UU.

Las autoridades sospechan que una de estas facciones ingresó a Reynosa y llevó a cabo el ataque de forma indiscriminada, como estrategia para controlar este territorio.

“Los tenemos ubicados. Ellos son Cartel del Golfo, pero diversas fracciones”, señaló Barrios a la cadena CNN.

“En este caso las fracciones de escorpiones y ciclones quieren quitarle la mayoría a la fracción de los metros”, señaló.

Barrios anotó también que el ataque había sido perpetrado por un comando de al menos 15 personas, por lo que la labor de las autoridades era perseguir a todos los responsables de la masacre.