Mundo Rural
El uno de diciembre próximo se cumplirán dos años del nuevo gobierno en México, el gobierno del Movimiento de Regeneración Nacional. Está a punto de concluir la primera de las tres partes del movimiento llamado de la Cuarta Transformación.
Hoy con tanta comunicación nada escapa, nada se esconde, todo se sabe. Hay tanta comunicación que se evade la realidad y se dicen muchas cosas que no existen, que no son creíbles. El mal manejo de la información también es una realidad.
Sin embargo, en el día a día, en el transcurrir de los días, las semanas, los meses, todos sabemos y percibimos de lo que está ocurriendo en todos lados, en todos los rincones del país.
Todos los días vemos cómo camina este gran país, cómo está siendo gobernado, las obras que se hacen, la situación del campo, la educación, salud, alimentación, seguridad, empleo, derechos, justicia, etc.
Preguntamos ¿qué ha cambiado del anterior gobierno al actual? ¿qué cosas diferentes se han hecho? ¿qué cambios existen a favor de la gente, de la vida? ¿avanzamos hacia cambios profundos, a transformaciones que lleven a una estabilidad social, económica y política del país? ¿qué significa la cuarta transformación?
Cuando un país experimenta una transformación es cuando se ordena la economía, se dan grandes pasos en la justicia social, laboral, derechos humanos, se acaba la corrupción, se reparte mejor la riqueza nacional, se apoya como nunca al campo mexicano, se brinda seguridad social a todos los mexicanos sin costo alguno, el Estado ofrece educación gratuita en todos los niveles, se acuerdan salarios justos para todos, se brinda empleo a todos los que los que lo soliciten, se controla la inflación y se eleva el poder adquisitivo de los trabajadores, se logra la autosuficiencia alimentaria, se exportan excedentes, se crea una cultura para el cuidado de los recursos naturales y protección de las especies.
En una nación en proceso de cambio la educación se convierte en el centro de todo, porque de aquí parte todo, un país con muy buena educación va a lograr mejores niveles de vida. En el nuevo país, en el nuevo gobierno se instala una educación humanista, transformadora, una educación que va a formar a una nueva generación de ciudadanos, una nueva generación que va a luchar por una nuevo país, por un país justo, libre y fuerte, un país sano, una sociedad sana físicamente porque se cuida, se previene, un país solidario y productivo, un país donde su gente cuida sus recursos, un país más seguro porque todos se dedican al trabajo, al estudio, al deporte, a la cultura.
Hasta hoy, en estos casi dos años del nuevo gobierno no vemos ni las señales de estas transformaciones, no se experimentan cambios de fondo, el país tiene muchos problemas de inseguridad, de salud, educación, de violencia, de feminicidios, de derechos humanos, de corrupción, de contaminación, de alimentación, de desempleo, de servicios, etc.
Se dirá, y con razón, que en dos años no se pueden corregir todos los problemas que enfrentamos, que se necesita más tiempo, pues sí, probablemente transcurra todo el sexenio y sigamos igual.
La pandemia vino, es cierto, a complicar las cosas, ya casi cien mil muertos y cientos de miles de infectados. La pandemia vino a frenar las acciones de gobierno y la economía nacional, el nuevo gobierno no esperaba esto.
Sin embargo, la vida tiene que seguir, el país tiene que continuar, las nuevas políticas se tienen que aplicar, las transformaciones se tienen que hacer, en México se tienen que hacer mejores cosas en esta nueva administración.
A estas alturas del nuevo gobierno no se ve cosas claras, siguen los mismos problemas de siempre y todo agravado por la pandemia, la llamada reactivación económica apenas se nota, hay mucho desempleo e inseguridad.
Si a la gente le preguntan ¿qué hay de nuevo en esta nueva era de gobierno en México? Contestarán que nada ha cambiado, que México no sólo sigue igual, sino peor, dirán que sólo hay buenas intenciones, buenos deseos.
Esperamos que al nuevo gobierno no se le vaya el país como el agua entre las manos, hay mil cosas por hacer, no es fácil, pero si otras naciones lo están logrando, con un cambio de políticas, con un cambio de sistema, en México también se puede, hay que hacer que las cosas cambien, y para eso no se necesitan decretos o leyes que castiguen, que obliguen a los ciudadanos, a golpes no se aprende.
Estamos lejanos de lograr un nivel cultural y económico en el que por ejemplo ya no haya necesidad de cárceles o de gastar cientos de miles de millones de pesos en seguridad porque ya no será necesario. Es complicado hoy, es cierto, pero hay que intentarlo, en un gobierno como el de México que se propone transformaciones de fondo, debe caminar en ese sentido.