Mundo Rural

Hipólito Contreras

Dentro de unas semanas Puebla y otros estados del país entrarán en plena efervescencia política debido a la elección intermedia para elegir diputados federales, estatales y presidentes municipales, además de 15 gobernadores, se realizará en el mes de julio del 2021. El Instituto Nacional Electoral y el Instituto Estatal Electoral iniciarán en breve los trabajos para preparar la elección.

Las dirigencias de los partidos políticos y los comités estatales y municipales ya inician acciones para ir preparando todo para entrare en el proceso electoral cuando las autoridades electorales lo indiquen. Desde luego, los partidos políticos preparan alianzas, coaliciones, con el fin de tener mayores posibilidades de triunfo.

Ya sabemos que los partidos que se disputarán las diputaciones federales y estatales y las presidencias municipales son Morena, PAN y PRI, los demás son partidos pequeños que lucharán por no perder el registro.

El Partido de la Revolución Democrática, que tuvo sus años de gloria porque llegó a gobernar por muchos años la capital del país, algunos estados e importantes municipios, por sus problemas internos hoy ha perdido esa fuerza que tuvo en el pasado, hoy luchará por no desparecer del escenario político nacional, luchará por no perder su registro.

El Partido del Trabajo, es el cuarto partido político del estado, ha logrado buenos resultados en pasadas elecciones y aunque estuvo a punto de perder su registro a nivel nacional, en Puebla está fuerte, su dirigencia afirma que irán solos en la capital del estado. Digamos que el PT como partido de izquierda va a sustituir al PRD, partido que viene de principios socialistas finales de los ochenta.

Para los ciudadanos de Puebla sólo ven tres fuerzas políticas y las que se le podría agregar el PT, por ellas votarán en la elección del 2021, aun cuando sean minorías las que voten lo harán por esos partidos.

En Puebla y el país los ciudadanos evaluarán el gobierno de Morena a nivel federal, estatal y municipal, determinarán y calificarán el gobierno morenista a casi tres años de gobierno (para julio del próximo año se acercará a los tres años el nuevo gobierno de Morena), y con base a la evaluación que hagan votarán.

Los ciudadanos de todos los sectores son buenos evaluadores, sabrán si el nuevo gobierno ha hecho bien las cosas o no, y decidirán si le refrendan el voto o no. El pueblo manda.

Esos mismos ciudadanos decidirán si le dan otra oportunidad al Revolucionario Institucional y a Acción Nacional, o de plano vuelven a votar en contra como lo hicieron en el 2018, ellos decidirán si vuelve la derecha con el PAN o el centro con el PRI, o siguen con la supuesta izquierda de Morena. En las verdaderas democracias los pueblos deciden el rumbo.

La pandemia revelará si los gobiernos morenistas supieron manejarla, si actuaron con inteligencia y responsabilidad, o de lo contrario, el problema se les fue de las manos y no supieron qué hacer ante el extraño fenómeno que no esperaban.

Lo que los ciudadanos quieren es un buen gobierno, buenos gobiernos, que tomen medidas acertadas y manejen correctamente los recursos públicos que vienen de los impuestos que todos pagamos. Los ciudadanos no quieren rollos, discursos, quieren acciones, hechos, cosas buenas que repercutan en elevar o mejorar las condiciones de vida de todos.

Si el PRI forma su alianza, si Morena hace lo mismo, si el PAN forma su grupo, pues que trabajen lo mejor posible, que nombren a sus mejores hombres y mujeres como candidatos, que respeten la equidad de género, que preparen y ofrezcan las mejores propuestas en todos los campos como educación, campo, seguridad, medio ambiente, salud, empleo, etc., y que dejen que el pueblo decida.

Este México del 2020 y del 2021 ha madurado mucho, ya no es el mismo, así que sabrá decidir hacia dónde va, hacia dónde camina.

Es necesario que para esta elección tengamos autoridades electorales cien por ciento autónomas sin la menor injerencia del cualquier gobierno o grupo político. Necesitamos autoridades electorales que sean verdaderos árbitros de la contienda electoral y que garanticen apego a las leyes y una real neutralidad.