Staff/Rosi
En el marco del Día Mundial de la Visión, especialistas enuncian las enfermedades visuales más recurrentes en nuestro país y exponen las implicaciones que la contingencia sanitaria actual ha provocado en el desarrollo del Síndrome de Ojo Seco.
6 de cada 10 adultos jóvenes en nuestro país padece Síndrome de Ojo Seco, condición que va en aumento por el uso indiscriminado de dispositivos móviles.
A escala mundial, al menos 2,200 millones de personas tienen deficiencia visual o ceguera; de estos casos, más de 1,000 millones podrían haberse evitado, y otros más no han sido tratados.
El envejecimiento de la población, los cambios en los estilos de vida y el acceso limitado a la atención oftalmológica, en particular en los países de ingresos bajos y medios, son algunos de los principales factores que impulsan el aumento del número de personas con deficiencia visual.
En México, se estima que hay 2 millones 237 mil personas con deficiencia visual y más de 415 mil 800 con ceguera3. Los principales factores de riesgo para desarrollar este padecimiento están relacionados a la edad y sus consecuencias más comunes son: cataratas, glaucoma, degeneración macular (relacionada a la edad), retinopatía diabética, opacidades corneales y afecciones oculares infantiles causadas por carencia de vitamina A.
En este sentido, el Día Mundial de la Visión, que se conmemora cada 10 de octubre, busca realizar un atento llamado a la población a no perder el derecho a ver y cuidar su salud visual, con el objetivo de reducir la discapacidad visual evitable como problema de salud pública mundial y garantizar el acceso de las personas con este tipo de discapacidad a servicios de salud que permitan tener una mejor calidad de vida.
En conferencia de prensa, el Dr. Jesús Jiménez Román, Oftalmólogo Especialista en Glaucoma y Jefe del Servicio de Glaucoma en la Asociación para Evitar la Ceguera en México, IAP, explicó que, la mayoría de los padecimientos mencionados relacionados con la salud visual, son evitables y en México es baja la cultura de prevención que existe en torno a la salud visual.
“Las consultas con el oftalmólogo para una revisión periódica de la vista y la salud ocular, deben ser consideradas esenciales y realizarse por lo menos una vez al año,” comentó el especialista, al tiempo que indicó que de acuerdo a datos de la Asociación Mundial del Glaucoma, el glaucoma es la segunda causa de ceguera en personas mayores de 40 años en el mundo y la primera causa de ceguera irreversible, ya que se estima, que hay 78 millones de personas afectadas en todo el mundo por esta enfermedad y se calcula que para el año 2040 estas cifras podrían aumentar hasta un 41% (110 millones aproximadamente)4.
El glaucoma es una enfermedad ocular silenciosa porque no tiene ningún síntoma en etapas iniciales y puede aparecer en edades tempranas. En nuestro país, se estima que el 4% de la población lo padece y lo desconoce.
En este sentido, una de las enfermedades más frecuentes asociadas al glaucoma, es el Síndrome de Ojo Seco, el cual, ha ido en aumento, principalmente por el cambio de actividades relacionadas con el estilo de vida durante la actual contingencia sanitaria.
A lo anterior, el Dr. Jiménez Román indicó que,“Esta condición se ha convertido en una de las secuelas más importantes de la pandemia global que se vive actualmente, ya que el 90% de los usuarios de dispositivos móviles lo padece”, explicó.
Debido a las medidas de confinamiento y distanciamiento social que se generaron a partir del inicio de la pandemia, en nuestro país se implementaron disposiciones oficiales de prevención, que mantienen a la mayoría de las personas trabajando desde casa, lo que ha incrementado los tiempos de exposición a monitores de dispositivos, así como el aumento de esta condición entre la población más joven.
El Síndrome de Ojo Seco es una enfermedad común de múltiples factores, causada por la falta crónica de lubricación y humectación sobre la superficie del ojo que provoca molestias, irritación, enrojecimiento, alteración en la vista, intolerancia a la luz, pesadez en los párpados y visión borrosa.
Se considera que este síndrome es una condición que a escala mundial afecta hasta al 20% de la población y prevalece principalmente en mujeres. En México, 6 de cada 10 jóvenes se ven afectados por éste y, según expertos, el padecimiento va en aumento debido al uso indiscriminado de computadoras y teléfonos móviles6.
“Los factores de riesgo que provocan el Síndrome de Ojo Seco pueden dividirse entre aquellos ocasionados por causas ambientales, como la contaminación atmosférica o la exposición a rayos UV; los derivados de problemas de salud o congénitos, como la inflamación crónica de la superficie ocular y la conjuntivitis alérgica; y los que se originan a causa de prácticas relacionadas con el estilo de vida, entre los más frecuentes se encuentran: la exposición constante a la computadora o el celular, el uso de lentes de contacto y humo del cigarro”, explicó el Dr. Jiménez Román.
En este sentido, el especialista destacó que, las lágrimas son indispensables para mantener humectados los ojos, eliminar partículas extrañas y evitar padecer Síndrome de Ojo Seco, ante el desgaste visual que provoca el estilo de vida actual; por un lado, en quienes trabajan desde casa y por otro, los niños y jóvenes que buscan entretenimiento a través de sus dispositivos móviles.
Para quienes ya viven con este padecimiento y necesitan aliviar los síntomas que presentan, la Dra. Alaina Castro, Gerente Médico de Laboratorios Grin, recomendó disminuir en la medida de lo posible, productos que aumentan la irritación ocular, como el maquillaje, usar lentes de sol al exponerse a los rayos UV, tener cuidado al cambio brusco de temperaturas y flujo del aire, organizar descansos para la vista y parpadear constantemente, así como bajar la intensidad de la luz de los dispositivos móviles; y principalmente, apoyarse de lágrimas artificiales, comúnmente llamados lubricantes oculares para mitigar las molestias.
Finalmente, en este día en que se conmemora la salud visual, se invita a tomar medidas de prevención para esta condición que es mucho más común de lo que pensamos y afecta a gran parte de los mexicanos. Se recomienda acudir oportunamente con el especialista, por lo menos una vez al año, para que brinde un diagnóstico certero y el tratamiento adecuado.