Gamaliel Jiménez

Arriba a la entidad el mandatario federal por segunda ocasión en este año a entregar apoyos de Programas del Bienestar

Entre aplausos y porras, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ofreció total respaldo para trabajar en conjunto con el Gobierno del Estado, en torno a los programas estatales impulsados para abatir la pobreza extrema.

Durante su segunda gira por Tlaxcala, desde que asumió las riendas del país, el mandatario federal entregó apoyos a los beneficiarios de los distintos programas del Bienestar, y dio detalles de los avances en Tlaxcala, sobre ellos.

Ahí mismo, dio a conocer que han establecido un trabajo conjunto con el Gobierno del Estado, más allá de intereses personales o de grupo o ajenos a los de la población en general.

De ahí que ofreció el respaldo del Gobierno Federal, al esquema de apoyo impulsado por el gobierno estatal, para abatir la pobreza extrema en la entidad denominado “Supérate”, para lograr que Tlaxcala sea la primera entidad en reducir al mínimo los niveles de pobreza extrema.

“Le tomó la palabra a Marco Antonio Mena Rodríguez, para que Tlaxcala sea primer lugar en que se erradique la pobreza extrema y lo haremos juntos, para que siempre se supere Tlaxcala”, remarcó.

Asimismo, refirió que “estamos trabajando unidos porque la patria es primero, no se puede poner por delante el interés personal, el interés de grupo, el interés partidista, lo más importante es el bienestar de nuestro pueblo y de nuestra nación, por eso tenemos que sumar esfuerzos, voluntades y recursos para que las cosas mejoren en nuestro país en beneficio de todos y de manera especial para la gente humilde”.

Por su parte, el gobernador de Tlaxcala, Marco Antonio Mena Rodríguez, reconoció la voluntad para establecer este trabajo conjunto con la Federación y agradeció la asignación de más de 200 millones de pesos que serán destinados para infraestructura carretera, al tiempo que aseguró que en conjunto podrán encajar los programas y esfuerzos para beneficiar a más personas.

Es preciso comentar, que contrario a la pasada visita del mandatario federal, en esta ocasión fueron mayores las porras, aplausos y gritos a favor que los abucheos, por lo que el ambiente fue tenso y positivo para ambos mandatarios.